Eli Ndiaye jugará en el Madrid
El pívot nacionalizado español formará parte del primer equipo merengue para completar el juego interior. Nigel Williams-Goss gana enteros.
El Madrid ha soñado con Campazzo en las últimas semanas, pero el base quiere apurar sus opciones en la NBA, así que su regreso no parece factible, pese a que mientras continúe sin equipo quede un resquicio. Con el argentino en Estados Unidos, lo que gana enteros es la continuidad de Williams-Goss, con otro año de contrato después de que en el primero no respondiera a las expectativas: bien atrás, buena actitud, flojo en ataque y en la generación de juego. Los problemas físicos tampoco le han ayudado (24 partidos de baja). Cuando parecía encontrar el ritmo, se lesionó en el segundo 52 de la Final Four en los tendones peroneos del pie derecho y celebró el título de Liga un mes después aún en muletas. Si no hay un movimiento inesperado, la plantilla quedaría cerrada a falta de los anuncios oficiales de los fichajes de Sergio Rodríguez, Hezonja y Cornelie.
Sin contar a Alocén y Randolph, lesionados de muy larga duración, habría 14 jugadores más Eli John Ndiaye. El canterano, de 2,04 m y 18 años, llegó en edad infantil al club y logró el pasaporte español por carta de naturaleza justo antes de cumplir los 16 en junio de 2020. El pívot, de origen senegalés, debutó con el Madrid en la final de la Supercopa en septiembre pasado y luego participó en cinco partidos más, cuatro de Euroliga. El próximo curso, el de su estreno sénior, formará parte de la primera plantilla para echar una mano a un juego interior con Tavares y los franceses Yabusele, Cornelie y Poirier.
Por fuera, una incógnita por aclarar: el futuro de Juan Núñez. Aún no ha renovado y el Madrid lo ha incluido en el derecho de tanteo para igualar cualquier oferta que reciba de la ACB. Si hay acuerdo, quedará por resolver si sigue o sale cedido. Con diez exteriores ya confirmados, parece lógico que Llull ocupe la posición de base, junto con el Chacho y Goss (más Hanga que puede echar una mano), y los puestos de escolta y alero se los repartan Causeur, Rudy, Abalde, Musa, Hanga, Hezonja y Deck. Aunque los dos últimos pueden actuar también de ala-pívots en un quinteto bajito, son siete jugadores para dos plazas sin contar a Llull. Cerca del overbooking. Le tocará gestionarlo a Chus Mateo.