El Gran Canaria aplasta al Breogán para meterse en la Copa
Los insulares llegaron a ganar de 34 puntos de diferencia: 80-46, 82-48. El acierto triplista amarillo, clave: 13/26. Hundimiento gallego generalizado.
Menudo atracón de baloncesto se acaba de meter el Granca a costa de un tristísimo Río Breogán (86-60). Los jugadores de Lakovic empezaron a abrir brecha en el primer cuarto, y al descanso ya ganaban por 18: 49-31. A falta de una jornada para cerrar la primera vuelta, la entidad insular certifica una nueva presencia en la Copa del Rey. La fiesta de final de año, completa. Un buen sorbo antes de las campanadas de mañana.
El partido no tuvo historia, apenas una piltrafa de equipo esta noche el Breogán de un impotente Mrsic. Atenazado, el equipo gallego apenas hizo acto de presencia y tampoco es que tuviera muchas opciones de maquillar la paliza que se estaba llevando, ni que fuera el sparring perfecto como saco de golpes de un voraz Dreamland Gran Canaria.
A base de triples, 8/13, descosió el Gran Canaria al Breogán en la primera parte. Así llegó su primera canasta del partido por medio de Slaughter, que al descanso ya tenía 12 puntos en el zurrón. Plantaba batalla el Breogán en los primeros minutos con Sajus al mando, dos canastas para el 3-4, siendo esta la única vez que su equipo, sin contar el 0-0 inicial, no estuvo por debajo en el marcador.
Ocurrió que un triple de Albicy que supuso el 12-4 obligó a Mrsic a parar el duelo cuando se habían jugado poco más de cinco minutos. Sin embargo, fue el Gran Canaria quien salió mucho mejor de ese parón, tras el que se empezó a hundir poco a poco el Breogán. De hecho, el parcial a favor de los locales llegó a ser de 14-0 tras la primera canasta de Brussino, que colocó el 17-4 en el marcador, prácticamente la misma distancia con la que se llegó al final del primer cuarto: 22-10.
Había tanto en juego, una plaza en la Copa del Rey si ganaba, que el Granca no se permitió ni la más mínima relajación ante un Breogán al que, hundido en la clasificación, le costaba alzar la cabeza en la Isla. Y eso que un triple de Nakic le hizo ilusionarse tras ese 27-20 que, de pronto, dinamitó John Shurna. Así, el alapívot estadounidense se cascó cuatro tiples del tirón en menos de tres minutos que, unidos al segundo de Albicy, reventaron el duelo: 42-26. La máxima diferencia de la primera parte llegó tras otra canasta desde la periferia, en este caso de Lammers (49-31), antes del 50-35 con el que ambos equipos enfilaron raudos el túnel de vestuarios.
Si había cualquier duda, por microscópica que fuera, de que el Gran Canaria tenía el partido sentenciado, los jugadores de Lakovic se encargaron de reventarlas nada más reanudarse el juego. Así, para empezar, dos triples de Brussino, uno de Slaughter y un Breogán que no se enteraba de nada. En apenas un suspiro la renta ya era de +25 tras ese 10-0 inicial: 60-35. Seguían machacando los locales desde más allá del 6,75, cinco triples solo en el tercer cuarto, desde donde Landesberg puso un +30, 71-41, que fue un poquito más tras una bandeja de Kljajic: 73-42.
El último cuarto únicamente sirvió para constatar la infinita superioridad insular y la insistencia de Happ (14 puntos, 11 rebotes, 22 créditos de valoración) en llevarse el MVP de diciembre, tomando así el testigo de Brussino. Pese a que el partido bajó el ritmo, esta antológica paliza ya era un hecho, y la diferencia llegó a ser de 34 puntos, 80-46, tras un triple de Salvó. La única buena noticia para el Breogán fue la tímida aparición de McLemore, con siete puntos que contribuyeron a que el marcador fuese apenas maquillado cuando sonó la bocina final: 86-60.
Y así, aplastando al Río Breogán, consiguió el Dreamland Gran Canaria otra clasificación para la Copa del Rey, a falta de una jornada para el corte definitivo, justificando así su viaje a Málaga en febrero. Mientras, la hueste de Mrsic continúa sumida en tantos problemas que no consigue abandonar los puestos de descenso.
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