La derrota ante Serbia en los cuartos del Eurobasket de Valencia y el posterior tropiezo frente a Rusia en la misma cita despejó el calendario de la Selección femenina para este 2022. Sin Mundial de Australia y sin Ventanas europeas clasificatorias hasta noviembre, la Federación ha decidido montar una miniconcentración ahora con el objetivo de no perder el contacto y que las jugadoras estén preparadas para futuros compromisos. Una gira, que acertadamente, se ha llamado "Camino al Futuro", porque la Selección se encuentra inmersa en esta auténtica regeneración.

"Tenemos una ilusión tremenda por construir un futuro nuevo. Después del traspiés del verano pasadmo tenemos más ganas que nunca de volver y creo que Miguel es el seleccionador perfecto para este momento y este equipo. El futuro suena muy bien", comentó Jorge Garbajosa, presidente de la Federación Española de Baloncesto.

Silvia Domínguez (35 años) es la capitana de un equipo en el que sólo otras dos jugadoras han alcanzado la treintena: Alba Torrens (32) y Leo Rodríguez (30). En el otro extremo, tres jugadoras nacidas ya en pleno siglo XXI: Lola Pendande (2000), Nerea Hermosa (2001) y Raquel Carrera (2001), que con 19 años se ganó una plaza para el Eurobasket y los Juegos Olímpicos del verano pasado. Futuro hay más que de sobra. Otras siete jugadoras tiene 25 o menos: Laura Peña, Paula Ginzo e Irati Etxarri (las tres nacidas en 1998) y Maite Cazorla, Ángela Salvadores, María Araújo y María Conde (todas de 1997).

"Estamos construyendo el equipo con una base sólida, de jugadoras muy experimentadas, y con mucho talento joven que nos ayudará a mejorar. Este verano no tenemos compromisos, pero esta concentración nos servirá para preparar la Ventana de noviembre, y sobre todo el partido ante Hungría, como si fuera una final", añadió Miguel Méndez, seleccionador español.

España jugará cuatro partidos de preparación este verano, dos en Melilla (ante Italia el 1 de junio y Bélgica, el 3 de junio) y un triangular en Cividale de Friuli ante Eslovenia (18 de junio) y el anfitrión, Italia (19 de junio).

"Todo lo que queremos en el futuro se construye en un verano como éste. Quizá este 2022 sea más importante de lo que la gente cree y hemos llegado aquí con la confianza de que podemos construir algo grande", explicó Silvia Domínguez, una de las dos capitanas de esta Selección. "Las veteranas también estuvimos en la posición de las jóvenes y entre todas vamos a sumar y a aprender las unas y las otras", añadió Alba Torrens, el buque insignia de un equipo obligado a reinventarse.