El Unicaja se suicida ante Baxi Manresa

Puede uno coger un diccionario y buscar cualquier adjetivo peyorativo, cualquier palabra que se haya utilizado antes para describir una mala actuación y aún así podría quedarse corto para definir el inicio de Unicaja en el partido ante Baxi Manresa. Los malagueños tardaron 14 minutos en meter una canasta en juego. Un 1 de 23 increíble, combinación de un nefasto acierto y una mala selección de tiro, que aplaudió con sorna el Nou Congost. Tanto les costó anotar que hasta les aplaudió el público local. Tal fue el desastre que el público, ya en el segundo cuarto, veía la victoria en el saco.

Y es que al terrible partido de Unicaja se le sumó un Manresa muy serio, a la altura de las circunstancias y con mucha más energía e intensidad. Corrieron, dominaron el rebote y acertaron desde fuera. Moneke machacó, Dani Pérez repartió juego y Francisco anotó los tiros imposibles. Una tormenta perfecta que se gestó en un primer cuarto que acabó 29-4. De récord.

Por poco que hiciera Unicaja mejoraría sus prestaciones, básicamente, porque en los primeros diez minutos no hizo nada. Con un punto más de fortaleza defensiva y tras por fin anotar su primeras canastas, los malagueños minimizaron la derrota (33-12). Manresa se atascó un poco más en ataque tras un primer cuarto inmaculado, pero al final del cuarto recuperaron el acierto. Tras tres triples seguidos la diferencia se disparó (45-17).

Con el partido decidido al descanso Manresa no quiso relajarse. Al fin y al cabo esto es una serie al mejor de tres y el objetivo pasó de ganar a hacerle daño a Unicaja. La ventaja subió hasta los 30 puntos (63-33) y eso que la efectividad local bajó. Los visitantes, al menos, ya habían llegado al partido. Barreiro deslumbró. El último cuarto solo sirvió para saber el tanteo final (86-63)