El Unicaja naufraga en Dijon
Mal partido de los malagueños que pierden su primer partido en la BCL, aunque dependen de sí mismos para ser primeros de su grupo.
Otro decepcionante partido del Unicaja. El equipo de Fotis Katsikaros no le creó un solo problema al Dijon que, sin ser el pelele del partido de ida en el Martín Carpena, tampoco es un equipo de la NBA. Darío Brizuela, 17 puntos, no endulzó la mala imagen de los verdes. Primera derrota del Unicaja en la Basketball Champions League que depende de sí mismo para terminar primero de su grupo y ahorrarse la molesta fase de grupos (segundos y terceros) para alcanzar los octavos. Jugando así no lo va a tener sencillo.
Quedaba claro que el Dijon no sería el que perdió en el Carpena de paliza (83-54). El subcampeón de la liga francesa salió con ánimo de reparar semejante afrenta y salió como un tornado. 11-2 en cuatro minutos con ocho puntos de Ware Fotis pide tiempo y el remedio parece darle buen resultado por mor de una buena racha de Brizuela que da como resultado igualar el marcador a los 13’ (21-21). Unicaja defiende muy mal, para no variar y da tremendas facilidades a los franceses en los tiros desde larga distancia, que ejecutan sin oposición, o en el pick and roll, jugada antigua que los malagueños son incapaces de interceptar. El duelo Holston-Ware hace estragos. 36 puntos entre los dos en el sorprendente 47-32 con el que se llega al intermedio. Ver para creer.
Tras la reanudación el Unicaja sale con mejor aplicación defensiva y con un rápido parcial de 3-12 se mete en el partido (50-44). Además el mortífero Holston se va al banquillo con cuatro personales. 17 puntos y siete asistencias, sus credenciales hasta ese momento. A los malagueños les falta continuidad y consistencia y ahora es Alingue, bajo tableros, quien ha tomado las riendas. El Dijon mantiene once punto de distancia en el final del tercer cuarto (60-49).
Los de Fotis no funcionan y sus arreones no traen bonanzas. Pérdidas y una zona débil hace que regresen los 14 puntos de desventaja (66-52 min. 33’). Con Cole disperso y los pivots en inferioridad, al Unicaja solo le queda para agarrarse a la esperanza, la inspiración de su ‘doble B’. Pero Brizuela no puede hacerlo todo y Bouteille aparece y desaparece de manera desesperante. A los 36’ el marcador se dispara hasta 74-57.
Sin la menor sensación de apuro o fatiga, el Dijon mantiene el control del juego sin mayores problemas para llevarse el partido sin mayores complicaciones. Mala imagen del Unicaja ante un Dijon correcto y poco más.