Delgado: "Me gusta que peguen y pegar yo, me divierto así"
El pívot dominicano, estrella de la ACB los dos últimos meses del curso pasado con el Estudiantes, lanza una declaración de intenciones. Aspira a entrar en Europa el año próximo.
Delgado va asomándose poco a poco por las sesiones del Bilbao Basket, aunque hoy estaba un poco aplatanado tras recibir la vacuna contra el COVID. Se nota que es un tipo alegre y extrovertido, que va a encajar perfectamente en este Bilbao Basket que se va a ejercitar estos días en el fabuloso polideportivo de las Irlandesas, en Leioa, donde el club realiza su campus. Sus dos últimos meses el año pasado, en los que fue el MVP de la ACB, son su gran aval de cara a la afición de Miribilla. Pero no se queda en eso. "Tengo muchas cosas que demostrar y aprender de mi juego, tengo poco tiempo acá, pero lo voy a ir trabajando poco a poco y con la ayuda del cuerpo técnico, que me está dando la confianza y comodidad que no he sentido desde hace mucho tiempo. Eso me va a ayudar mucho", señala con su discurso reposado.
El Bilbao Basket trabaja con muchos jugadores, pero también con bastantes bajas. Mañana inicia la concentración en Gijón y tiene una cita ante el Breogán, a la que llega muy justo. El 27 se mide con el Burgos. Luz y Reyes causan baja por pequeñas roturas de fibras. Goudelock aún está muy justo y jugará poco, y la incorporación de Withey, tras pasar el COVID, está prevista para mañana, aunque ya se sabe que todo depende de la burocracia. Hakanson está ya con todos tras clasificar a Suecia para el Mundial de 2023 y se ha añadido a otro temporero para acompañar al croata Delas. Se trata del base lucense Pablo Ferreiro, que ha pasado por A Coruña y Oviedo en LEB. A todos ellos hay que sumar los chavales de la cantera Chacón y Velasco, así como Ardanza, cedido por el Zornotza. Monge se encuentra con la selección de Euskadi Cadete que juega el Campeonato de España en Huelva.
Como en casi todos los casos que se presentan, el contacto con Mumbrú fue decisivo para fichar a Delgado, "me llamo y me dijo las cosas como son, me habló de hombre a hombre y me dijo lo que cree que es mejor para mí y para mi futuro", sostiene el pívot dominicano. "Me ayudó, me dio consejos y aparte de hablarme como 'coach' del Bilbao me habló como un amigo... como fue jugador, me dio consejos que los tomé en cuenta". En definitiva, su nuevo jefe le ha dado confianza. "cree en mí y sabe lo que es mejor para mí".
Al interior Le gusta lo que ha visto por el momento en Bilbao, es más, se siente "impresionado", desde los jugadores hasta el cuerpo técnico, le han dejado "con la boca abierta", percibe que está en "un gran club y muy bien organizado" con la mentalidad de ganar, así que entiende que "este año va a ser muy especial". Esos dos últimos meses en los que se llevó el MVP en la ACB no siente que le vayan a perseguir a la hora de enjuiciar su labor, porque "creo que no me definen, puedo mejorar muchísimo". "La meta que tengo este año es por encima de esos dos meses. Tenemos que mejorar el equipo completo, un solo jugador no va a ganar los partidos, no me puedo enfocar solo en mi sino en el equipo y que progresamos juntos, esa es la clave ahora. Nunca pienso en que yo tengo que meter puntos, coger rebotes… sino ayudar al equipo", refleja.
Su idea es, por tanto, seguir progresando, y en lo colectivo, lanza ambicioso: "Quiero que compitamos en Europa el año que viene, esa es la meta". No se imagina volver a estar peleando por la zona baja, como con el Estudiantes. Ahí tuvo al Bilbao Basket como enemigo directo, y al final su actual equipo se llevó el gato al agua y en el que estaba, acabó en la LEB. "Fue increíble, al Bilbao Basket se le veía las ganas de vencer y quedarse en la ACB, cada vez que iban a la cancha se veía que iban a ganar, la seriedad y el enfoque, el cuerpo técnico hizo un gran trabajo. Veía sus partidos", lanza con una mirada traviesa.
Con la llegada del jugador caribeño, Miribilla recupera esa figura del pívot que va a chocar, interior... algo que parece en desuso con los famosos cincos móviles y que pueden jugar abiertos. "Ese siempre ha sido mi juego -constata-, lo que trato siempre es que en mi posición siempre yo sea el que salga ganando y ayudar al equipo, jugar fuerte lo llevo en la sangre porque me gusta el contacto físico, que peguen y pegar yo, porque el juego se trata de divertirse y siento que me divierto así".
Afortunadamente podrá sentir el calor de parte de la afición, aunque solo de una parte de Miribilla, él que es un jugador tan expresivo, "cuando veo a la gente que viene a apoyarlos es muy lindo, cuando voy por la ciudad muchas personas me dicen ‘contad con nosotros’, eso llena, con el apoyo de los fanáticos vamos a jugar muchísimo mejor". Por su parte, el director deportivo, Rafa Pueyo, definió así a un pívot que empezó muy mal en España el año pasado al aterrizar fuera de forma (nada que ver con su actual estado físico) y acabó como un cohete: "Es un jugador al que conocemos bien en la Liga Endesa. Tuvo un final de temporada a un altísimo nivel consiguiendo ser MVP de la competición los dos últimos meses. Sus virtudes son claras. En mi opinión dos fundamentalmente, su potencia y su intuición para el rebote en los dos aros y sobre todo su capacidad de finalizar cerca de canasta utilizando su cuerpo y las fintas, es su jugador muy efectivo, además, llevamos unos días entrenando y lo que estamos viendo es que es muy buen compañero y además un magnífico pasador. Eso nos va a hacer mejores como equipo".