El Baskonia ha hecho oficial el regreso de Jayson Granger a la franquicia vitoriana. La noticia saltó hace un par de días pero ya es algo real desde la perspectiva de la confirmación del club. Jayson regresa a la que fue su casa hasta el verano pasado, donde ganó la Liga ACB dentro de la burbuja de Valencia con Dusko Ivanovic al frente del equipo. El acuerdo consiste en una temporada con opción de continuidad una segunda si las partes están de acuerdo en verano de 2022.

Con Baldwin y Granger se cierra el puesto de 1 y habrá que ver lo que ocurre con el joven Kurucs. Vildoza y Henry se marcharon, respectivamente, a los New York Knicks y Fenerbahçe. Quino Colom, que terminó la pasada temporada como temporero, tampoco continuará en el equipo. Granger puede jugar también de escolta por lo que su entrada en el equipo descarta la continuidad de un Zoran Dragic que ni siquiera entró en la lista baskonista de derecho de tanteo.

La aventura alemana del uruguayo sólo ha durado un año pero le ha permitido al charrúa ganar la liga de ese país y ser nombrado el mejor jugador de las finales. Además, hizo un gran papel en el Alba de Berlín de Aito García Reneses en Euroliga, lugar del que también procede el talentoso italiano Simone Fontecchio. El año pasado, el Baskonia pescó en ese mismo caladero fichando al lituano Rokas Giedraitis. Hasta que no termine la NBA no se sabrá si alguna franquicia estadounidense pregunta o no por él.

Baldwin IV, Marinkovic, Costello y Fontecchio son altas. Colom, Massenat, Vildoza, Henry, Polonara y Diop son bajas. Existe incertidumbre sobre el futuro de los jóvenes: Kurucs, Raieste y otros que podrían reforzar al equipo en pretemporada y que el año pasado militaron en el Juaristi ISB de Azpeitia y Azkoitia: Savkov y Hanzlik. Asimismo, habría que contar también en esa lista con Macura, que en la temporada pasada estuvo en Serbia. Miguel González, que militó en el Canoe, podría ser cedido de nuevo o incluso traspasado.