LEB ORO | COVIRÁN GRANADA 57 - LECHE RÍO BREOGÁN 83
El Leche Río Breogán regresa a la ACB tras ganar en Granada
El equipo gallego gana el tercer partido de la final de la LEB Oro (57-83) a los nazarís y vuelve a la Liga Endesa tras descender en 2018.
Lugo vuelve a ser ciudad de Liga Endesa tres años después. El Leche Río Breogán arrolló al Covirán Granada (57-83) en el tercer partido de la final de la LEB Oro y colocó así la segunda victoria en el casillero de una eliminatoria de ascenso en la que tenía el factor cancha en contra y que comenzó con derrota. Este es la quinta vez en su historia que los gallegos suben a la ACB.
Los celestes serán el único club de Segunda que suba a Primera tras el acuerdo alcanzado el verano pasado entre la FEB y la ACB, que pasará de nuevo a tener 18 equipos la próxima temporada en lugar de los 19 de la última. El Acunsa GBC y el Movistar Estudiantes serán los nuevos equipos de la división de plata.
Los celestes amarraron rápido el partido. No tardaron ni un cuarto en mostrar autoridad y dejar a los nazarís con el miedo del cuerpo. Los primeros diez minutos acabaron con un contundente 12-29 con un 6/9 desde el triple de un Breogán que en ningún momento bajó de marcha. Siempre en quinta y, claro, las distancias no pararon de aumentar: del 13-30 al 29-49 del descanso. El Granada moría desde el perímetro (2/9). Las pérdidas (8) y su inferioridad en el rebote (12 a 19) tampoco ayudaban a un club que desde su fundación en 2012 no ha parado de crecer: cuatro ascensos en nueve años para asentarse en la LEB Oro y quedarse a un paso de la élite.
La voracidad gallega no se detuvo. Los chicos de Epifanio, que también regresa a la ACB tras el ascenso con el Hereda San Pablo Burgos, dieron un paso más adelante en ambos lados de la cancha. En ataque, abrasaron con un parcial de 0-14 dirigido por Larsen, que amplió la ventaja hasta el +30 (29-59). Definitivo. El danés cogió el testigo de unos enormes Sollazo y Quintela (vaya manera de fustigar desde lejos). Además, jugaron con los nervios granadinos y provocaron que su rival no anotara en juego durante casi ocho minutos. Un golpe del que ya no se recuperó el Covirán y que hace del Breogán, una vez más, equipo de élite en el baloncesto español tras una temporada redonda, de doblete: campeón de la LEB Oro y de la Copa de la Princesa.