Una genialidad de Brizuela le da el triunfo al Unicaja
El escolta, casi sobre la bocina, anotó la canasta ganadora para el Unicaja. El Obradoiro nadó, pero murió en la orilla. Gran partido de Enoch, 22 puntos y 29 de valoración.
Darío Brizuela, en la última jugada, dio la victoria al Unicaja con una sensacional canasta plena de acierto, serenidad y confianza. Un enceste colosal que chafó una brillante reacción del Obradoiro que empató a 83 un partido que perdía 74-83 a falta de 1,47 minutos. Su gesta no le bastó para forzar la prórroga y evitar una séptima derrota consecutiva que le complica el futuro mientras que Unicaja coge impulso en su objetivo de meterse en el playoff por el título. Enorme partido de Enoch, 22 puntos y 29 de valoración y Robertson (22 puntos y 21 de valoración). Brizuela (19 puntos y 24 de valoración) el más destacado de los del Carpena
Fue un partido en líneas generales sorprendente. El Obradoiro sorprendió de salida con un 7-0 que descolocó a Unicaja. El acierto de Robertson y la relajación defensiva malagueña abrió el marcador hasta un amenazante 26-16 (min. 7).
Con 30-22, Unicaja apretó en defensa y Jaime se puso a funcionar y con una de sus canastas aceleradas puso a los suyos por delante en el marcador (35-37 min. 18). Se llegó al descanso con 40-41 y el llamativo detalle de que entre Robertso (15 puntos) y Enoch (14) llevaban los 29 puntos de los gallegos.
El partido avanzaba y el Monbus purgaba por sus pérdidas (acabó con 15 por solo dos del Uicaja). Unicaja no tenía su mejor tarde con el juego exterior, pero sus tiradores siempre aparecen aunque sea a ráfagas. Con unos buenos ratos de Bouteille y Brizuela, su ‘Doble B anotadora’, Unicaja abrió una pequeña brecha, 48-53 (25’).
Los de Katsikaris tampoco estaban finos con el rebote donde los de Moncho eran superiores. La diferencia en las pérdidas y posterior administración del balón (en este tramo 13 Obradoiro por una de Unicaja) explicaban en parte el 60-62 con que se cerró el tercer cuarto.
La recta final se empinó para los locales con la quinta personal de Daum y un triple de Brizuela (62-68 min. 33’). Unicaja se fue de siete puntos a los 35’, 67-75, con Nzoza haciendo daño bajo tableros. De nuevo, Moncho pidió oxígeno. Pero Unicaja se quedó sin Nzosa y Thomas, eliminados por cinco personales. Hombres altos. Pérdida de poderío que dio alas a los anfitriones que se pusieron 74-75 con un parcial de 7-0 amortiguado por cinco puntos seguidos de Bouteille en el momento más oportuno para los de Fotis (74-80 a falta de tres minutos).
Un triple de Brizuela a falta de 1’47 (74-83) dio una diferencia casi demoledora. Obradoiro no se rindió y Unicaja se desconcentró con tres errores tremendos en ataque que dieron como resultado un increíble 9-0 de parcial, con enceste colosal de Albert Oliver. Pero en la décima final, una genialidad de Brizuela, otra más, dio la victoria a los verdes. Una canasta que fue revisada por si estaba o no en tiempo. Jarro de agua fría para el Obradoiro que consecha su séptima derrota consecutiva. Y alegrón para el Unicaja .