Miniotas, el MVP de Lituania ambiciona destacar en la ACB
"Creo que puedo ayudar en este equipo de una de las mejores ligas del mundo", sostiene el nuevo 'cuatro' del Bilbao Basket, que trata de buscar acomodo a Moses y no hará más movimientos por ahora.
Regimantas Miniotas es, tal vez, el nombre más impronunciable de la historia del Bilbao Basket. Por la red circulan mil bromas al respecto. Desde el Miniotauro hasta Minion, esos simpáticos seres de la película 'Mi Villano Favorito'. "Regis", proclama el jugador lituano como quiere ser conocido. Estaba nervioso en su puesta de largo, en el Hotel Gran Bilbao, porque era la primera rueda de prensa en la que ejercía de protagonista. Y eso que es internacional con su país. De aquí que tras concluir la comparecencia ante los medios se sacó aliviado un "Eskerrik asko" ('muchas gracias')..
Es el tercer movimiento del Bilbao Basket, un club poco acostumbrado a este trajín, y menos a estas alturas, en noviembre. Han llegado los cedidos Kljajic y Huskic, y ahora Miniotas por esta temporada y la próxima. El director deportivo, Rafa Pueyo, confesó que están en el mercado porque es su obligación por si se pone a tiro un mirlo blanco, pero la idea es no hacer más fichajes por ahora. Sí están pendientes de encontrar acomodo a Moses y aunque la prensa griega lo sitúa en el AEK, nadie de este club se ha dirigido a la entidad de Miribilla.
Miniotas, de 24 años y 2,08 metros, que llega a Bilbao procedente del Vytautas Prienai, equipo del que era capitán. Pueyo definió al 'cuatro' lituano como un tipo con energía, que se refleja en las estadísticas de rebotes, tiene buen tiro de tres y es un gran pasador. Su compatriota Kulboka le ha puesto al tanto de lo que le espera en Bilbao. Además, coincidió en el vuelo a la capital vizcaína con Balvin, que regresaba de la estancia con su selección en esta ventana, como le ha pasado a Miniotas. Han estado en la burbuja del Preeuropeo. "Igual que yo voy a tratar de ayudar al equipo, sé que todos juntos colaborarán para realzar mi juego, juntos trataremos de ir hacia arriba. Creo que puedo echar una mano en este equipo de una de las mejores ligas del mundo", aventura. Es el MVP de la liga lituana y sus estadísticas han sido muy buenas (18,5 puntos, 10,5 rebotes y 2,8 asistencias por partido en la liga báltica), pero sabe que ahora tiene que cambiar el chip y ser uno más: "Es un nuevo capítulo, si no me viera preparado, sería el primero en no querer estar aquí". Lamenta no poder contar con gente en la grada, por culpa de la pandemia "y espero tan pronto como sea posible estar con la gente en el pabellón". Encontrarse a un equipo tan abajo en la tabla no es para él un problema, porque ha venido "para ayudar". Esgrime que "ha habido lesiones" y "cuando todos estemos bien, remontaremos".