El entrenador del San Pablo Burgos, Joan Peñarroya, reconoció la exigencia que planteó el Barça este domingo en una semifinal histórica para los burgaleses, que se marchan de la Fase Final de la Liga Endesa pensando que la próxima campaña la puedan empezar junto a su público, ausente en La Fonteta.
"Un partido en el que sabíamos que el poderío que muestra el Barça en su defensa, negando líneas de pase, espacios, y ese juego tan atlético nos ha costado entender al principio. Nos ha colapsado mucho ", dijo tras el encuentro en rueda de prensa.
"El cambio en defensa los ha parado bastante, recuperamos 16 puntos antes del descanso, y en la reanudación las pérdidas en los primeros ataques hace que otra vez ellos cojan ventaja y ahí ya no hemos sido capaces de volver. Han tenido el acierto que pueden ser" , añadió.
Peñarroya reconoció que el Barça fue superior. "Hay que darle mérito al rival también, que no nos ha dejado jugar cómodos, con un juego muy físico, que nos ha costado interpretar. Queríamos ganar esta semifinal y ahora es tiempo de darnos una pausa y después ya analizaremos todo lo que ha sucedido", afirmó.
La valoración de la temporada tendrá que esperar, pero para el técnico del Burgos lo importante ha sido la manera de competir de su equipo. "Esto es baloncesto, en la pista juegan cinco contra cinco, no juegan euros ni jerarquías , y esa ha sido nuestra intención todo el año y lo hemos conseguido en la mayoría de los partidos", dijo.
Por último, Peñarroya lamentó no haber tenido a la afición, ausente como la de todos los equipos, por las medidas contra el coronavirus. "Lo peor es no haber podido compartir esta Fase Final excepcional con nuestra gente. Mi deseo es que la próxima temporada la podamos empezar todos juntos otra vez", finalizó.