El Burgos coge en Sassari más de medio billete para cuartos

El San Pablo Burgos dio este miércoles un paso de gigante para su continuidad en la Liga de Campeones de baloncesto tras vencer a domicilio al Dinamo Sassari en el primer partido de la eliminatoria de octavos de final por 81-84.

El cuadro de Joan Peñarroya se marchó al descanso con una gran renta que los de Gianmarco Pozzecco lograron equilibrar para alcanzar un último periodo tremendamente igualado. Los burgaleses supieron templar el duelo en la conclusión para sellar la victoria en un choque en el que destacó el extraordinario acierto de Vitor Benite para sumar 30 puntos (32 de valoración).

El Dinamo Sassari comenzó ganando pero un fenomenal parcial de 0-13 sostenido en los triples y en la defensa llevaba la renta del San Pablo Burgos a los diez puntos (6-16) y el duelo a un tiempo muerto.

La pausa les hizo bien a los sardos, que recortaron distancias con un inspirado Michele Vitali (14-16). El enorme acierto exterior de Vitor Benite sustentaba la ventaja de los de Peñarroya cuando se llegó al final del primer cuarto en Cerdeña (23-26).

Bassas y Gentile intercambiaban triples (26-29) antes de que los castellanos echaran en falta la fortuna exterior. Dinamo apretó pero otro parcial de 0-14 puso al San Pablo Burgos con 15 puntos arriba en el marcador (32-47), una ventaja que conservaron cuando llegó el descanso (36-51).

El regreso de vestuarios le sentó mejor a la escuadra italiana, que crecía con las actuaciones de Evans, Spissu y Bilan para acercarse a un conjunto burgalés que se vio obligado a pedir tiempo muerto (49-56).

El Dinamo Sassari impuso su ritmo en este cuarto y consiguió tomar la delantera en el marcador (60-59) cerrando el cuarto con el marcador igualado a 68 puntos.

El encuentro se iba a mantener con la máxima igualdad hasta el final. Los de Peñarroya volvían a tomar una breve renta (70-73) antes de sumar una racha de 0-6 para recuperar ocho puntos de diferencia a favor (71-79).

Los tiros libres aproximaban a los locales (81-82), pero una canasta de Clark selló la victoria burgalesa (81-84).