Ennis suma la tercera victoria seguida para el Zaragoza
El equipo maño logró su séptima victoria en la Champions con 14 puntos del base canadiense. Los de Fisac firmaron un gran segundo cuarto (29-15).
El Casademont Zaragoza roza la clasificación para los octavos de final de la Liga de Campeones tras superar con comodidad al Neptunas Klaipeda lituano en un encuentro donde fue muy superior.
Al equipo maño le vale ganar el partido que le queda en casa contra el PAOK, que está empatado en la última posición con Brindisi y Neptunas, de los tres que restan para finalizar la liguilla, para conseguir su objetivo, si bien intentará apurar sus opciones de estar entre los dos primeros para tener un cruce menos complicado.
El conjunto de Porfirio Fisac volvió a ser el equipo reconocible que había sido hasta hace poco, tras las dos últimas derrotas en la Liga española, y con defensa, velocidad, solidaridad en el juego y acierto en los lanzamientos desarboló a un rival, especialmente al llegar al descanso, para posteriormente saber regular para nunca bajar de una diferencia que le pudiera inquietar.
El comienzo del encuentro fue errático parte de los propietarios del terreno, con varias pérdidas de balón y fallos en los lanzamientos, mientras que su rival, mucho más centrado, ponía tierra de por medio gracias a su acierto en los triples (5 de 6) dada la falta de intensidad en el exterior del Casademont Zaragoza.
Sin embargo, conforme fueron desgranándose los minutos del primer cuarto el conjunto "rojillo" cogió ritmo y con su dominio bajo canasta y apuntándose también a los lanzamientos de 6,75 (5 de 9) le dio la vuelta a la situación para acabar los diez primeros minutos con 26-21.
Cuando parecía que el equipo maño ya estaba asentado en su juego el inicio del segundo cuarto fue tan desalentador como el del primero pero se repitió la historia con una clara mejoría local ante un equipo lituano al que le costaba más anotar desde fuera gracias a la buena defensa maña.
Esto trajo como consecuencia que los hombres de Porfirio Fisac apretaran el acelerador y viendo el aro con facilidad llegaran a marcar una máxima renta a su favor de 19 puntos (55-36) coincidiendo con el tiempo de descanso.
Tras éste se produjo una reacción del conjunto báltico que le acercó hasta los diez puntos en el minuto 28 pero el Casademont Zaragoza no permitió que la respuesta fuera más allá y, regulando su intensidad, logró mantener a raya a su oponente para que en ningún momento supusiera un problema ni menguase la diferencia de seguridad de esos diez puntos.