Laso innova y el Madrid rompe al Betis con tres pívots en pista

El Madrid llegó a Sevilla con la lección aprendida y la recitó de pe a pa sobre el parqué del pabellón San Pablo. Venía avisado por las derrotas en Bilbao y Zaragoza, donde tropezó con todo el equipaje tras exigentes compromisos en la Euroliga, bien por la dureza del rival o por las estrecheces del calendario. Esta vez los blancos habían vapuleado menos de 48 horas antes al Olympiacos, pero se centraron en la tarea con los cinco sentidos. Concentración y muy buena defensa para que el talento propio hiciera aún más mella en el enemigo, en un Coosur Betis que siempre estuvo contra las cuerdas aunque aguantase en pie.

Laso, además, le puso originalidad a la cita. Camino ya de los 30 partidos esta temporada (23 victorias y 5 derrotas), sigue dando rienda suelta a una rotación bien pensada y mejor ejecutada, que mantiene a toda la plantilla con una buena porción de protagonismo. Mickey fue inscrito en las horas previas como extracomunitario en lugar de Deck, y con su alero alto en casa, el técnico hizo una apuesta diferente: tres pívots de inicio en cancha a la vez, Randolph, Thompkins y Tavares. El resultado fue magnífico pese a la zona con la que Curro Segura trató de contraatacar. Aguantaron los tres juntos nueve minutos, acompañados por Campazzo y Causeur: 10-23. Y repitió el envite tras el descanso con un éxito aún mayor.

De salida, los triples habían fluido (como lo hacía Thompkins) y cuando el Real sumaba 7 con un 50% de acierto el Betis exhibía un desvalido 0 de 10. Iba 22 abajo (14-36) y amenazaba con desbarrancar… Su mérito, sujetar la desventaja, coserla incluso parcialmente. Entre Conger e Izundu apilaban 19 de los 25 tantos verdiblancos.

Causeur, en racha

En la reanudación, de nuevo los tres grandes en pista más Causeur desatado, como el jueves ante el Olympiacos. El escolta francés había anulado en el primer cuarto a AJ Slaughter y en el tercero mostró su gran estado de forma en ataque: 11 de sus 18 puntos, incluido un mate, en cinco minutos (jugó 18:10).

Campazzo dirigía la orquesta (6 asistencias) y Tavares taponaba tres balones (la impresión es que fueron más, aunque ya es Top-5 en la historia liguera del Madrid) y cambiaba muchos más lanzamientos. La ventaja tocó los 30 (29-59), Laprovittola ayudó a la causa y casi todo lo demás sobró, salvo los minutos para Garuba y Nakic y el orgullo torero local. El líder sigue líder, en forma en diciembre, mes de bajones.