Prepelic brilla pero no evita la derrota de la Penya ante el Betis
El esloveno fue el mejor del choque. Acabó con 35 puntos y 7 de 13 en triples, pero no evitó la primera victoria del Betis en su regreso a la ACB.
La dirección magistral del veterano base Albert Oliver y la solvencia en la pintura del pívot estadounidense Shayne Whittington facilitaron este domingo la victoria del Coosur Betis sobre un Joventut que, lastrado por las lesiones, cosechó su segunda derrota consecutiva en la Liga Endesa.
Fue vistoso el primer cuarto, terminado con empate a veintitrés en parte por la laxitud defensiva de ambos conjuntos y en parte por la inspiración de sus tiradores, muy acertados, con mención especial para el escolta esloveno de la 'Penya' Klemen Prepelic, autor de trece puntos en diez minutos.
El intercambio de canastas continuó hasta el descanso, con el internacional polaco AJ Slaughter llevando el paseo de la anotación (10 puntos en los dos primeros cuartos) para el conjunto bético y los verdinegros replicando con un espectacular porcentaje (6/12) en los triples.
Un contraataque de Slaughter dio una pequeña ventaja a los locales a falta de dos minutos para el intermedio (43-39), pero el tiempo muerto de Carles Durán surtió efecto y el Joventut se fue al camerino por encima en el marcador (43-44) merced a un triple de Ventura y a dos tiros libres de Omic.
El Joventut sufrió un cortocircuito en ataque al inicio del segundo cuarto que permitió al Coosur Betis estirar el tanteo después de un triple de Whittington (53-47, min. 24), que acertó con el aro al quinto intento desde más allá de los 6,75 metros.
Después de que Albert Oliver anotase los dos tiros libres de una falta antideportiva de Ventura, Whittington convirtió una canasta con tiro adicional y el propio Oliver elevó la ventaja local sobre la barrera de los diez puntos (63-51, min. 28) con un triple.
A pesar de que en el periodo final se reanudó el recital de un Prepelic que se fue hasta los 35 puntos, el cuadro sevillano supo administrar los minutos finales sin que peligrase un triunfo rubricado por la buena mano en los tiros libres cuando los catalanes hacían faltas a la desesperada.