Scariolo: "El primer asesino es Campazzo; y el segundo, Scola"

Con la tranquilidad de quien se sabe con el trabajo bien hecho, pero con la tensión del que sabe que está a un paso de entrar en la historia, Sergio Scariolo compareció ante los medios en la primera parte del hotel Shangri La de Pekín.

¿Qué se siente al jugar la final de un Mundial?

Pues estamos bastante ocupados todo el día y cuanto más los vemos, más sube nuestra sensación de que será muy complicado. No han llegado aquí por casualidad. Han llegado con determinación, carácter, fuerza defensiva y optimización brutal de recursos ofensivos. Tenemos que estar preparados para un partido a cara de perro con momentos duros para jugar y con un final igualadísimo.

¿Se sienten dos selecciones espejo?

Tenemos punto en común y diferentes pero nos une haber llegado contra pronóstico y eso cualifica el trabajo que se ha hecho. Y al margen de los nombres y los pronósticos, dicen que juegan las dos mejores selecciones del torneo.

¿El partido de Ningbó le sirve de algo? Ricky resolvió al final pero durante un buen rato Vildoza le asfixió.

Ricky metió 24 puntos ese día... Puede dar alguna indicación pero diferente. No estaba Campazzo que es el jugador que determina más la forma de jugar en Argentina junto a Scola y por nuestro lado no estaba Marc que es un jugador importante. No creo que tenga muchas similitudes.

¿Y sí son dos equipos de filosofía parecida? Llevan muchos años ganando pese a que se van estrellas.

Bueno. Hay puntos en común y puntos que alejan. Creo que ambos somos equipos en los que tenemos un gran jugador interior y una predominancia de juego perimetral e intentamos jugar agresivamente. Y que en ataque intentan jugar en equipo, posiblemente jugando con manejadores de balón. Ellos pueden jugar con tres manejadores de balón. Hasta Deck cuando entra sabe generar desde el bote. Es un equipo con muchas armas para generar peligro. Y es uno de los mejores equipos defensivos de la competición.

Se decía que los mejores días de estos equipos habían pasado. ¿Esto tiene que ver más con lo mental?

Ahí entras en un terreno peligroso porque no conoces su estructura. No profundizaré en la de Argentina. Pero confío en la nuestra. Sé cuánto trabajo hay detrás para tener el verano que hemos tenido. Y repito, no es tanto una cuestión de lo que hemos ganado este verano. Es una cuestión del trabajo que se ha hecho en la academia. El sentido de continuidad, de pertenencia. Dar una continuidad. Y eso es lo que queremos transmitir a los que vienen detrás. No podemos dejar la herencia de los juniors de oro como una losa o una mochila llena de plomo que tienen que llevar. Tienen que confiar, trabajar y que igual tendrán menos talento pero otras armas con las de poder competir porque será su realidad. Ojalá nazca otro Pau, otro Juan Carlos, otro Marc, otro Ricky. Pero el legado que queremos dejar es ese, que se puede competir y buscar la manera de hacerlo. Sentir que la pasión y el amor por el juego y la camiseta que llevas y que el deseo por emular a estos ejemplos te lleva a superar barreras que parecían insuperables.

Decía Campazzo que se va a enfrentar a una Selección con criminales como Ricky...

El primer asesino es él; y el segundo Scola que es otro que sabe cómo matar. Pero han sabido complementar muy bien. Laprovittola y Deck saliendo del banquillo cambian partidos y Brussino y Garino cambian partidos. Son un equipo que ha tenido que reducir un poco sus rotaciones pero ha encontrado una química.

¿La presión está en nuestro tejado?

La trayectoria no cuenta nada. Ojalá tuviese un peso, pero tiene un peso cero. Ellos han ganado unos Juegos, nosotros recientemente hemos ganado alguna medalla olímpica más. Pero pesa cero.

¿Y el desgaste de las prórrogas?

Está ahí, pero hemos jugado cuatro horas más que ellos.