Marc: "Esperemos que quede ketchup; si no, rebañamos"
"¿111 partidos este año? Mejor no pensarlo. El partido es mañana. Queda un último esfuerzo, peor uno grande porque ellos trabajan increíble".
Con los brazos llenos de rastros de la batalla contra Bogut, Baynes y los pívots australianos, Marc Gasol habló para los medios en la previa de la final del Mundial contra Argentina. Así lo ve el pívot de Sant Boi.
Dijo Scariolo al final del partido que sus 33 puntos habían sido lo de la norma del ketchup. ¿Queda ketchup en el bote?
Esperemos que quede algo de ketchup. Si no, rebañaremos.
De jugar mañana, que jugará, será su partido 111 oficial de esta temporada. ¿Para caerse de espaldas?
Mejor no pensarlo. Ahora no, mejor no pensarlo. El partido es mañana. Hay que pensar sólo en ese porque no te ayuda. Hay que pensar en la recuperación, eso es lo que te va a ayudar y en las tendencias del rival.
Tiró dos libres contra Australia en una situación extra-límite. Seguramente la peor situación para un jugador. No puedes ganar, pero sí perder. ¿Qué hizo para meterlos?
Siempre me concentro en algo mío personal y tuve la suerte de que entraro. Porque no siempre entran.
Al final del partido reunió a sus compañeros en el centro del campo. ¿Cuál fue el mensaje, que el trabajo no se había terminado?
Sí, seguro que las líneas fueron por ahí. Queda un partido más, un último esfuerzo, la misma línea y línea ascendente de trabajo porque nos lo va a pedir el partido. El partido nos va a pedir que nos esforcemos y que mejoremos. Algo más tendremos que hacer.
¿Hay algún mensaje de grupo de lo que viviese en Saitama 2006 que le pueda ayudar mañana?
No había WhatsApp hace 13 años y los móviles no eran tan modernos. La serpiente y poco más. No tengo ningún mensaje.
Hablamos de experiencias.
Todas. Imagínese, han pasado trece años de aquello, todas. Todas las buenas y malas experiencias te sirven y te valen para estar aquí, afrontar una final y luego volverá a salir el sol.
¿Va a tener tiempo de recuperar?
Todos tenemos el mismo tiempo para recuperar pero tenemos un equipo médico magnífico que nos ayuda muchísimo y estamos trabajando con ellos. Las sensaciones son buenas. Hay que analizar a Argentina, pero no volverse loco. Hacen más cosas además de Scola y Campazzo. Deck, Laprovittola, Brussino... Y el entrenador les anima y les da valentía.
¿Qué les llama más la atención?
Cómo trabajan. Trabajan increíble. Es un grupo que trabaja, se sacrifica muchísimo. Ponen el nivel físico muy alto, tienen jugadores determinantes. Nos adaptaremos o ellos se tendrán que adaptar según vaya el partido. Lo que podemos controlar que es el nivel físico y concentrarnos para controlar sus tendencias y cómo ejecutan y colapsan la zona. Hay que estar preparado para ello.
Puede ser su segundo Mundial, éste en un rol muy distinto al de 2006. ¿Qué piensa?
De momento, pasa por mi cabeza Argentina y nada más. Sólo pasa eso. No pienso en las consecuencias, ni por un lado ni por otro. Quizá no somos el equipo con el mayor talento ofensivo pero el trabajo de los dos equipos atrás nos han permitido estar aquí.
Es una bonita coincidencia verse con Scola.
Luis está increíble. Lo ves subiendo el balón, haciendo coast to coast. Le energía y la ilusión que mueve el jugar para tanta gente, un país, te empuja. Nos sentimos muy afortunados por estar aquí después de tantos y tantos años.