NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

MUNDIAL DE CHINA 2019

España llega a una final sin Pau por primera vez en 20 años

Desde el Europeo de 1999 España no se clasificaba para una final sin Pau en el equipo; la Selección consigue ganar más allá de la alargada sombra de su líder.

Actualizado a
Pau Gasol, en el Mundial de Japón 2006
RODOLFO MOLINADIARIO AS

El 7 de julio de 1999 España caía ante Italia en la final del Europeo de Francia. El combinado nacional, que en ese momento estaba liderado por Alberto Herreros, se había deshecho de la anfitrión en semifinales (63-70) y de la Lituania de Sabonis en cuartos (72-74), pero no pudo con los transalpinos y se quedó sin el oro.

Ese mismo año, una plantilla llena de futuras estrellas conseguía el Mundial de Lisboa tras vencer a Estados Unidos por 94-87, logrando un oro histórico que ganaría notoriedad con el paso de los años. La historia bautizó a esa plantilla como Los júniors de oro. Entre ellos estaba Pau Gasol, un jugador sin el cual sería imposible entender la historia del baloncesto español.

Por entonces no se sabía, pero el año 1999 sería clave en el devenir de nuestro baloncesto. Los jóvenes apretaban para lograr un cambio generacional que empezó definitivamente con el debut de Pau Gasol con la selección española absoluta el 15 de agosto de 2001. Los veteranos empezaban a ver el final. Y España no volvería a clasificarse para una final sin el jugador de Sant Boi en la plantilla... hasta ahora.

Han tenido que pasar 20 años para ver de nuevo este hecho. Pau se convirtió desde su debut en la cara de la Selección, el hombre de referencia y el líder indiscutible. Su llegada a la NBA engrandeció su leyenda después de destacar en el Barça, y fue en la Liga norteamericana donde se convirtió en una referencia en España y fuera de ella. Cada campeonato internacional que jugaba el ala-pívot llenaba de ilusión a los aficionados españoles, y la decepción era notoria cada vez que renunciaba a un torneo veraniego (algo que ha ocurrido pocas veces) para descansar de cara a la siguiente campaña.

La ausencia de Pau provocaba que los resultados de la Selección no fueran los mismos. Ocurrió en el Eurobasket de Serbia de 2005, en el Mundial de Turquía de 2010 y en el Eurobasket de Eslovenia de 2013. Curiosamente, en ninguno de los tres torneos España pudo avanzar a la final. En Serbia quedaron cuartos, en 2010 finalizaron en sexta plaza, mientras que en 2013 se llevaron el bronce en una Selección entrenada por Orenga y liderada en pista por Marc y el Chacho.

Contra Australia se rompió la maldición. España venció en la segunda prórroga y se clasifica por primera vez desde 1999 a la final de un campeonato internacional. No cuenta el año 2006, en el que Pau no jugó el partido por el título ante Grecia, pero sí estuvo en el Mundial y fue esencial en la clasificación, asó como el MVP del torneo (por primera vez en la historia para un jugador que no ha disputado la final). Ese año se lesionó en semifinales contra Argentina, el mismo rival que espera a los de Scariolo en este torneo. Seguro que Scola lo recuerda. Estaba allí. Otro ser eterno de una generación infinita.

Ahora la Selección busca dar un paso más. Ha acabado con la maldición. Ha escapado de la sombra de su líder. Un hombre que se acerca a los 40 años y al final de su carrera pero que quiere ir a Tokio y que tiene a las espaldas 11 medallas con el combinado nacional, 14 si contamos las logradas en categorías. Ante Argentina, España disputará la primera final sin Pau en 20 años y buscará reeditar el campeonato logrado hace 13 en Japón. La épica y la historia se juegan en Pekín, y el equipo de Sergio Scariolo peleará por el oro. Y esta vez, lo hará sin Pau Gasol en pista.