Una pachanga con Fidel Castro
Antes del Mundial de Puerto Rico en 1974, Díaz-Miguel recibió una llamada del seleccionador cubano para jugar un dos contra dos con el dirigente.
Camino del Mundial de 1974 en Puerto Rico, la Selección española hizo una escala técnica en Cuba. Fue cuando el entonces seleccionador cubano, Carmelo Ortega, telefoneó a su homólogo, Antonio Díaz-Miguel, para hacerle una curiosa propuesta. Jugar un dos contra dos contra un tándem cubano en el que jugaría... Fidel Castro. Antonio Díaz-Miguel recordó aquel episodio en un relato que rescató en su día la web de la FEB: "Fidel daba mucha leña, pero también recibía y no decía nada".
En el Mundial de 1974, el mismo año en que ganó los Juegos Centroamericanos y del Caribe, Cuba ganó tres partidos durísimos de la primera fase: Checoslovaquia (61-60), Australia (92-79) y Canadá (80-79). En la segunda fase, sin embargo, sólo pudo derrotar a España (84-75) y Brasil (85-80), pero las tres grandes, Estados Unidos (70-83), Unión Soviética (66-83) y Yugoslavia (83-101), se le hicieron inalcanzables. Cuba fue cuarta, su mejor clasificación en el Mundial. Cuentan que el seleccionador, Carmelo Ortega, utilizaba una vieja táctica de motivación en las charlas. Les decía: "Ayer llamó Fidel". Algunos lo tomaban como un estímulo. Otros, como una manera de meter un poco de miedo. Y el resto, nunca se lo creyó.