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MUNDIAL DE BALONCESTO 2019

El Mundial de dos velocidades

23 de los 32 partidos de las dos primeras jornadas se decidieron por diez o más puntos y nueve de ellos, por 20 o más. "No sé qué quieren con este sistema", dice Djordjevic.

Guangzhou
El Mundial de dos velocidades
FIBA

El primer Mundial con 32 equipos de la historia es ya el Mundial de las dos velocidades. 23 de los 32 partidos jugados en las dos primeras jornadas, un 71,8%, se resolvieron con diferencias de diez o más puntos entre los equipos y nueve de esos 32 (28,12) acabaron con rentas de más de 20 puntos. Serbia ha ganado sus dos primeros partidos 109-75 a Angola y 126-67 a Filipinas; Francia le metió 103-64 a Jordania; España 101-62 a Túnez; Lituania 101-47 a Senegal... "No sé qué quieren lograr con este sistema. Hay doce equipos que pueden perder por mucho y no es bueno para ellos", dijo Sasha Djordjevic, seleccionador de Serbia, en un ejercicio de sinceridad que pone al descubierto las enormes diferencias entre algunos.

Negocio contra nivel deportivo, la gran pregunta es si es viable un Mundial con 32 selecciones. Es la primera vez que la FIBA organiza un equipo con tantos participantes. Se jugarán hasta 92 partidos en ocho sedes y la idea del organismo que preside desde hace apenas unos días Hamane Niang pero que controla Andreas Zagklis, sucesor de Patrick Baumann, es ir en esa dirección. La calidad de la primera fase está en cuestión, pero tampoco se puede obviar que un torneo así siempre esconde sorpresas: la victoria de la República Dominicana que ha dejado fuera del Mundial a Alemania; la de Brasil sobre la Grecia del celebrado Antetokounmpo; o el emocionante Estados Unidos-Turquía que se jugó este martes en Shanghái. Son, sin embargo, excepciones de lo que debería ser una normalidad.

La FIBA ya vivió este debate hace décadas. En el Mundobasket jugado en España en 1986 participaron 24 selecciones. El invento no funcionó. FIBA llegó a la conclusión de que se había sobredimensionado el evento antes de tiempo y en las ediciones de Argentina (1990), Canadá (1994), Atenas (1998) e Indianápolis (1998) se regresó a los 16 equipos. En Saitama, cuando se creyó que se habían dado de nuevo las condiciones idóneas para ampliarlo, volvieron las 24 selecciones, como en Turquía (2010) y España (2014). La puesta en marcha del sistema de las Ventanas abrió un nuevo ciclo. Campeonatos continentales cada cuatro años en lugar de cada dos pero un Mundial con 32 selecciones para aumentar las opciones de los países de estar en el gran evento. Centralizar el negocio, ese es el objetivo de Zagklis.

Los jugadores, por su parte, cada vez juegan más y con calendarios sin unificar: ligas naciones, Euroliga, Eurocup o Champions Basketball, Ventanas, Mundiales con más selecciones y hasta un Preolímpico con cinco partidos por país a cara de perro. Pero más allá de la tremenda carga de partidos, la cuestión aquí es la diferencia de calidad. La primera fase de este Mundial es de dos velocidades. Y suerte que Estados Unidos no vino con sus ogros. Si no, estaríamos por tres.