La vista puesta en China, el alma con Chicho Sibilio

España avista China. Tanto que Scariolo, que en Los Ángeles ya tenía mirada de entrenador en competición, anunció los descartes con un día de anticipo para despejar las mentes de los que se van y de los que se quedan. Contra Dominicana (21:30, Cuatro) ya dirigirá a los doce que se estrenarán ante Túnez el 31 de agosto en Guangzhou.

No será una noche más en Madrid. El carismático Palacio se llenará para dar una cálida despedida a este grupo que desde 2006 hizo nacer una química especial y que aún genera un potente efecto llamada pese a ausencias tan emotivas como la de Pau Gasol. Todo está vendido para ver a España en el WiZink Center, sede de un partido de las Ventanas ante Letonia en septiembre del año pasado que no pasará a la historia de la Selección, pero que a la postre resultó decisivo para alcanzar el Mundial y que elevó a Quino Colom con una canasta casi sobre la bocina. Al base de Andorra le ha salido la cara de la concentración. Él estará en China mientras Jaime Fernández, chapeau por su contribución, se baja dispuesto a coger el próximo autobús del Eurobasket 2021. O quién sabe si de Tokio.

La afición quiere arropar a sus héroes de hoy. Los de la NBA, con Marc y Ricky a la cabeza; los de su Madrid, con Llull y Rudy encantados de recibir un achuchón en su casa. Y hasta los del Barça (Ribas, Oriola, Claver), por qué no. Y también quiere aplaudir a los mitos de ayer.

El partido contra la República Dominicana es el escenario perfecto para darle el último adiós a Chicho Sibilio, un alero de muñeca privilegiada, sabor y ritmo caribeño, 87 veces internacional y protagonista de noches memorables como la primera victoria oficial contra Estados Unidos en el Mundial de Colombia de 1982. La noche que Martín Tello nos contó cómo ellos soñaban mientras nosotros dormíamos. La FEB rendirá tributo a Sibilio con un minuto de silencio y un emotivo montaje audiovisual que al otro lado del charco también se aplaudirá desde Santo Domingo.

Y luego vendrá el baloncesto. España empieza la fase tres de la preparación. Después de las primeras sesiones de entrenamiento en Madrid que se completaron con las victorias en Pamplona y Málaga, la fase dos de Estados Unidos ha ido estableciendo ya bases de juego que deben ser perfeccionadas en esta fase tres que arranca hoy y continuará en Ningbó. Allí España se medirá a Argentina y Rusia, potenciales (y casi seguros) rivales en cuartos de final del Mundial. La Selección quiere dejarse el rodaje hecho, pero no pasarse. Scariolo sabe que el campeonato se juega en la segunda fase de Wuhan. Allí es donde hay que tener las luces puestas.