EUROBASKET (F) | ESPAÑA 71 - SERBIA 66
España tumba a la anfitriona y luchará por el oro europeo
La Selección dominó gran parte del duelo y supo sufrir en el cuarto final para doblegar a Serbia (71-66). La final, este domingo ante Francia (20:30h en La 1).
La Selección llegó a Belgrado con el objetivo del Preolímpico y una vez conseguido no se conformó. “Quiere más”, como dice el eslogan de este año. Ni el ambiente caldeado, ni verse por debajo en el marcador (aunque momentáneamente) pudieron con ellas. El domingo se jugará el oro ante Francia. Dos viejas conocidas frente a frente.
A eso de las 20:00 saltaba España a pista. Sonaba ‘Resistencia’ de Ska-p, una canción que se ha convertido en himno para un equipo que se agarra a eso, a resistir en cada partido. Y le tocaba aún más con el infierno que le esperaba este sábado en Belgrado. Tras un campeonato en el que la Selección ha disputado casi todos sus partidos con gradas vacías (media entrada en Riga ante Letonia), el ambiente en el Stark Arena en esta semifinal era bien distinto: 6.500 seguidores, abucheos cada vez que España cogía el balón y gritos en cada posesión de Serbia. Un ruido ensordecedor que no afectó a las de Mondelo.
Laia Palau se sentó tras cinco minutos (segunda falta y 6-6 en el marcador) y con Silvia Domínguez a los mandos, España cogió velocidad. La base del Perfumerías Avenida, que parecía crecer varios centímetros en esta parte, anotó ocho puntos seguidos para que España se marchara diez arriba al final del primer cuarto (21-11). El verano pasado, en el Mundial de Tenerife, España echó en falta a su pequeño genio, que llegó entre algodones. Este verano la catalana es otra.
El principal problema para la Selección en ese primer asalto era la segunda falta de Ndour, que se marchaba al banquillo ipso facto. No volvió hasta después del descanso. Serbia, sin su quinteto de gala en pista, encontró a Stankovic (22-17) y obligó a Lucas Mondelo a pedir un tiempo muerto. Un parón necesario para aclarar las ideas y templar los nervios. Justo después, robo de Anna Cruz que anotaba un 2+1 para enfriar algo el ambiente y entrada por la izquierda de Queralt Casas (llevaba sin anotar desde el partido ante Ucrania) para devolver el +10 al marcador (27-17). Cruz sentía el ‘picorcillo’. Con Serbia cerrada en la pintura, España tenía que tirar de media distancia y la nueva escolta del Fenerbahçe tiene muñeca, como demostró con los 9 puntos en ese cuarto. Por Serbia, la veterana Butulija era la que hacía daño. La base encontró el camino (pequeños desajustes en el dos contra uno) y se marchó al vestuario con 7 puntos y 7 abajo para su equipo (37-30).
Tras el descanso el ambiente se fue caldeando cada vez más. España conservó la renta y acabó el cuarto +1, aunque la sensación era que Serbia apretaba. El gran problema de España estaba en el juego interior. Las faltas. Ndour, Nicholls y Gil llevaban tres. Momento para María Pina, que jugó la última posesión como ‘cuatro’ y colocó, con un tirito a cuatro metros esquinado, el 58-50.
Ndour se encogió en defensa para no cometer la cuarta y Brooks lo aprovechó. Diez puntos seguidos de la ala-pívot y Serbia se colocó a uno (62-61). Pero la reacción de Serbia no acababa allí: triple de Butulija para colocar la primera ventaja serbia (62-64) desde el 3-4. A España le tocaba estar a remolque, una situación casi nueva en este Eurobasket. Dabovic cometía falta y antideportiva (al banquillo con cinco faltas) y España retomaba el mando con los tiros libres de Ndour (67-66). Laura Gil, inmensa en defensa, subió la diferencia un punto (68-66) y a Silvia no le tembló el pulso en el infierno serbio (70-66). Serbia tuvo varias opciones para intentar ganar la batalla, pero Nicholls agarró el rebote (lucha) y la flecha le daba el balón a España. Falta a Anna Cruz, que fallaba el primero pero metía el segundo. A la final por la puerta grande. Estas chicas son inmensas.