El botín de los Pelicans: primeras rondas de los Lakers hasta 2025
Durante la noche se fueron conociendo los detalles de uno de los grandes traspasos de la historia de la NBA. Los Pelicans obtienen un gran botín de futuro.
Ayer, menos de 48 horas después de que la temporada NBA terminara oficialmente con el título conquistado por Toronto Raptors, Lakers y Pelicans acordaron el que será uno de los grandes traspasos de la historia de la Liga. Anthony Davis, todavía con 26 años (y en teoría con su mejor baloncesto por delante) dejará New Orleans Pelicans para jugar en Los Angeles Lakers al lado de LeBron James. Una operación que comenzó a fraguarse en enero, cuando el jugador pidió públicamente salir de Nueva Orleans a través de su agente Rich Paul, la mano derecha de LeBron, y puso los Lakers como su gran prioridad de futuro. Después de un sainete que acabó de la peor manera en el mercado invernal, el culebrón ha tenido vuelo corto en verano y el pacto ya está cerrado entre franquicias.
El trazo grueso fue anunciado por Adrian Wojnarowski: Lonzo Ball, Brandon Ingram, Josh Hart y tres primeras rondas (entre ellas el número 4 que habían obtenido los Lakers este año en la lotería) a cambio de uno de los mejores jugadores de la NBA. Después se supo que David Griffin, nuevo jefe de los despachos de los Pelicans (y el arquitecto de los Cavaliers de LeBron campeones en 2016) había obtenido más piezas de futuro que podrían acabar siendo hasta cinco primeras rondas. No es exactamente así aunque en la operación sí hay un swap: el intercambio de primeras rondas si los Pelicans así lo consideran oportuno básicamente porque el pick de los Lakers es más alto y un segundo que finalmente no es tal, según Tania Ganguli (Los Angeles Times) sino la posibilidad de elegir entre dos años distintos para hacerse con el último pick del traspaso. Este es el formato final de lo que reciben los Pelicans en una operación en la que los Lakers se llevan a Anthony Davis, uno de los cinco mejores jugadores de la NBA:
- Tres jugadores: Lonzo Ball, Brandon Ingram y Josh Hart
- La primera ronda de los Lakers de 2019, ya asignada en el número 4 del draft después de la lotería.
- La primera ronda de los Lakers con protección top-8. Es decir, si fuera una de las ocho primeras elecciones del draft, los angelinos se la quedarían. En ese caso, pasaría a ser una primera ronda sin ninguna protección ni restricción en 2022.
- Derecho a intercambiar (swap) primeras rondas en 2023: si a los Pelicans les gusta más la de los Lakers, pueden quedársela y dar la suya a los angelinos.
- La primera ronda de 2024 sin protección y con la opción para los Pelicans de renunciar a ella y esperar a 2025 para quedarse en su lugar con la primera de los Lakers de ese año.
Esta última ha sido la que más confusión ha creado porque en principio se habló de la primera de 2024 y el derecho de intercambio de las de 2025, pero finalmente parece que se trata de una primera que los Pelicans se quedarán en el primer año o esperarán al segundo para recibirla. Así que la operación se cierra en principio con tres jugadores, tres primeras rondas y el derecho a intercambiar una cuarta.
Una de las razones por las que se han cerrado así estos últimos flecos, con la inclusión de más botín para los Pelicans, es que los Lakers pueden necesitar esperar hasta el 30 de julio para hacer oficial el traspaso y poder manejar así sus cuentas en la búsqueda de una tercera gran figura que unir a LeBron y Davis. En ese caso, y para que su ingeniería financiera funcione, necesitarían la buena voluntad de unos Pelicans que podría haber quedado sellada de esta forma. Es el trazo de un traspaso, como no podía de otra manera, absolutamente monumental.