El Baskonia se queda cerca de remontar en el OAKA
El equipo vitoriano perdía por 19 en el 1º cuarto (21-2), pero llegó a ponerse arriba tras un mate de Poirier (58-57). El Panathinaikos se pone 14-13 también.
El Panathinaikos perdió el martes a uno de los personajes más importantes de su historia: Thanasis Giannakopoulos, el tío del histriónico presidente actual. Y qué mejor homenaje que machacar a un rival directo de Euroliga y seguir luchando por el playoff. El pasado fin de semana humillaron al Olympiacos (0-20) una vez que el conjunto del Pireo no se presentó para jugar el partido liguero. Los rojiblancos quieren jugar la liga Adriática y el club del trébol ya ha dicho que también tratará de apuntarse a esa competición. Los verdes se las prometían muy felices pero sufrieron una barbaridad.
El Kirolbet se plantó en Atenas con cuatro bajas sensibles: Shengelia, Granger, Janning y Garino. El Panathinaikos echó de menos también a Pappas, con una lesión de largo recorrido debido a sus problemas de rodilla. Los de Perasovic tardaron un mundo en conseguir su primera canasta (dos tiros libres de Voigtmann) y para el minuto 7, el choque ya iba 21-2. Los vascos llevaban muchas pérdidas y perdían claramente el rebote. En ese momento, la valoración de los helenos era de 22 y la de Baskonia, de -8. Faltaba 1:54 para terminar la primera entrega y los de Perasovic obtenían su primera canasta de campo. 26-10 al final del primer periodo.
Las diferencias siguieron creciendo: 31-13 y 37-20. La reacción de Baskonia se basaba en el acierto desde el tiro libre pero Panathinaikos seguía defendiendo muy duro. Diop vio la tercera personal, se quitó la máscara en señal de protesta y la tiró al suelo. Técnica, cuarta falta y flaco favor a su equipo. Con un peligroso 41-23, el entrenador de Kirolbet pidió tiempo muerto para tratar de reactivar a su equipo. Diop vería luego la quinta en el minuto 32.
Los vitorianos estuvieron 23 abajo en el tercer cuarto pero fue cuando salió a colación el carácter Baskonia. Con apenas 7 jugadores y sin rotaciones ni opción de hacer muchas faltas, endosó un parcial de 0-15 a Panathinaikos con una gran dirección de Huertas. Se marchó al final del tercer cuarto con 8 puntos abajo (56-48).
Nada más comenzar la última entrega, Marcelinho puso a los suyos a 6 y se empezó a crear de verdad en la remontada. Como telón de fondo, también estaba el average particular, que en Vitoria fue de +9 para los de Velimir Perasovic. El milagro cobró forma de verdad en el último cuarto. Fue la madre de todas las remontadas (58-57 con un mate de Poirier en el 33). Rick Pitino no daba crédito. "Estamos en serio peligro de perder el partido", les decía a los suyos en un tiempo muerto. Darrun Hilliard hizo el 58-59 con una canasta de media distancia y empezó a asentar claramente la respuesta de su equipo. El OAKA se convirtió en una tumba cuando minutos antes había sido una verbena.
El choque se fue muy igualado a la recta final (65-65, min. 37). Panathinaikos volvió a defender con fuerza y algunos jugadores como Vildoza tomaron alguna decisión erronea. Baskonia abusó del bote en algunos ataques y los de Pitino estuvieron muy atentos a las líneas de pase en defensa. Thomas no perdonó y los verdes confirmaron su victoria pero sudando tinta china. El Kirolbet, por lo menos, pudo librar el averaje particular, algo impensable al comenzar el tercer cuarto. Los dos equipos tienen un balance de 14/13 y, si hay doble empate, pasará Baskonia. Si hay triples empates, las circunstancias cambiarán. Al conjunto alavés le queda un calendario de cuidado: Real Madrid, Anadolu EFES y CSKA en Moscú. Al Panathinaikos le falta Armani, Madrid y Buducnost.