COPA DE LA REINA | PERFUMERÍAS AVENIDA 74-LOINTEK GERNIKA 46
El Perfumerías se pasea y habrá Clásico en la final ante Girona
Las charras, en modo apisonadora, pasaron sin despeinarse ante un Gernika que no encontró la tecla y echó en falta a Williams. Robinson y Loyd, estelares.
Habrá Clásico en la final de la Copa de la Reina. La lógica ha gobernado de una forma aplastante el torneo organizado en Mendizorroza: los cuatro primeros jugaron las semifinales (se puede decir que sólo el Valencia hizo pasar serios apuros al Uni Girona) y los dos grandes colosos del baloncesto español se citan el domingo en la pelea definitiva. Si antes de que se abriera el fuego, el Perfumerías Avenida ya sabía que nadie le va a quitar el cartel de favorito, la exhibición del partido ante el Gernika le pone en otra dimensión, aunque tuvo muchas facilidades. El cruce que cerraba sesión duró solo un cuarto. La horrorosa tarde de Williams (la estrella de la ronda anterior) y la superioridad física de las charras, demostrado con su autoridad bajo el aro, dejaron el partido en puro humo. El Perfu buscará su tercer título seguido y el Girona dar un zarpazo como el de Conquero hace tres años. El Clásico (repetido en la final de las cuatro últimas ligas) ya está aquí.
El Perfumerías Avenida si se pone serio es un Dream Team, una apisonadora a la que nadie en España se le puede equiparar. Tardó en calentar el motor 8 minutos, hasta el 12-11. A partir de ahí empezó a sacar sus armas y abatió a un Gernika al que nadie le ganará en ilusión pero que se vio muy pronto un equipo menor en cuanto a potencia de fuego con respecto a su adversario. Williams había sido la estrella de los cuartos de final ante el IDK Gipuzkoa; casi nada más aterrizar, se sacó un 38 de valoración en el derbi. Pero suele decirse que lo importante no es llegar y sobresalir, sino mantenerse. Ese listón es imposible mantener ante el principal candidato al título. Se fue enredando con errores en tiros claros, tras su uno contra uno centelleante, que le sacaron del primer tiempo: 0/12 llevaba al descanso. Tenía tanta ansiedad, tanta hambre de canasta, que se quedó en el descanso sola, mientras el resto se iba a vestuarios para meter una a media distancia y tener esa placentera sensación de la red. El descalabro en porcentaje se prolongó en el segundo tiempo hasta un 0/17 (0/16 en dobles y 0/1 en tiros triples). No anotó hasta el minuto 24, dos tiros libres tras una antideportiva de Silvia Domínguez.
La merma física era evidente y bajo el aro Robinson se puso las botas. El cuadro charro marcó el ritmo con dos contra uno en la subida del balón que fue atascando a las vizcaínas. Mario López intentó trampear su inferioridad con trampas tácticas, variando sus defensas, pero cuando el Perfu cogió velocidad de crucero y encontró las canastas bajo el aro, las zancadillas dejaron de surtir efecto. Loyd estuvo estelar. El Lointek anotó solo una canasta en el tercer cuarto, un triple de Naiara Díez, una jugadora que es santo y seña en el vestuario de Maloste, que conoce su papel de especialista y aplica soluciones inmediatas. El último acto sirvió para ofrecer un suplemento de la fiesta a las campeonas en curso, con una ventaja rondando la treintena.