La NBPA, el sindicato de jugadores de la NBA, ha realizado, coincidiendo con el parón del All-Star de Charlotte, cambios en su estructura directiva tras el final de algunos mandatos en el comité ejecutivo. 

El más llamativo es el de LeBron James, que no continuará. Ha estado los últimos cuatro años como vicepresidente primero, pero su tiempo ha expirado y no se mantendrá en el cargo. El elegido para pasar a esa posición es Andre Iguodala, alero de los Warriors, que antes estaba en el puesto de vicepresidente.

La rueda sigue girando y hay más cambios, además del de Iguodala, en los puestos de vicepresidentes. Pasan a formar parte del comité ejecutivo Malcolm Brogdon (Bucks), Jaylen Brown (Celtics) y Bismack Biyombo (Hornets), en sustitución de Carmelo Anthony, Stephen Curry y el mencionado Iguodala.

Seguirán como vicepresidentes Garrett Temple (Clippers), C.J. McCollum (Trail Blazers), Anthony Tolliver (Tiimbewolves) y el español Pau Gasol (Spurs).

El adiós de LeBron

LeBron James, uno de los jugadores con más voz y con más apoyo social del deporte en Estados Unidos, decide dejar el sindicato pese a que continuará su amigo Chris Paul como máximo representante del mismo.

El momento en el que 'The King' se aleja no es casual. En la conversación del mundillo de los Lakers, además de la recuperación de su lesión, el estado en el que se encuentra Luke Walton y las aspiraciones para llegar a la postemporada, está el mercadeo del próximo verano y cómo ha afectado el caso de Anthony Davis para que se vuelva a hablar del tampering.

Que James pertenezca a la misma agencia de representación que Anthony Davis, el objetivo de los Lakers en el pasado periodo de traspasos, ha reabierto el debate sobre la conveniencia o no y sobre los efectos que tienen estas alianzas a la hora de conseguir nuevos fichajes de jugadores.