Los Spurs tumban a los Nuggets en el mejor día de Juancho (27+13)

Los Denver Nuggets perdieron el liderato del Oeste en San Antonio ante un equipo que está jugando al nivel de los mejores de la liga. Parece mentira, después de aquella racha horrible cuando acumularon algunas de las peores derrotas en su cancha. Parece mentira y, a la vez, no debería sorprender a nadie. Una vez más empezamos a enterrar a Popovich y los suyos y una vez más han hecho que nos traguemos nuestras palabras. Al menos de momento.

Son ocho victorias en los últimos diez encuentros tumbando a rivales como Lakers, Sixers y hoy a unos Nuggets que llegaban como líderes y que ya no lo son. Los de Denver no pudieron imponer su juego en ningún momento, algo que suelen hacer casi todas las noches. Y quien más se vio afectado fue Nikola Jokic. El serbio repartió 10 asistencias, pero sólo metió 4 puntos. Metió un triple (falló los otros cuatro tiros de campo que intentó) y un tiro libre. Todo el mundo sabe lo que significa el pívot para este equipo y lo que pasa si consigues anularle. Y a eso se dedicó San Antonio.

En ausencia de Jokic y de un Jamal Murray también muy gris (9+5+2), Juancho Hernángomez fue el gran protagonista de los suyos. El español firmó un auténtico partidazo, seguramente el mejor desde que llegó a la NBA. Logró su récord personal de anotación (27) con una serie espectacular desde el triple (6/7). Por si esto fuera poco acabó el encuentro con un doble-doble gracias a los 13 rebotes que cogió. Junto a él, Malik Beasley (22+7+3) fue el más destacado desde el banquillo.

Pero el gran partido de estos dos secundarios se queda corto ante los actuales Spurs. Sus dos estrellas, LaMarcus Aldrige y DeMar DeRozan, están en un nivel sensacional. Anoche se pudo ver muchas jugadas en las que el resto de compañeros le dejaban unos aclarados enormes a DeRozan para que se jugase unos contra unos. Los metió casi todos. 30+7+5+2 con 9/17 en tiros. Aldrige acabó con 27+4+2.