Los Rockets vencieron en casa en el primero del que pueden ser varios partidos sin Chris Paul, uno de sus jugadores de referencia. De que se olvidara a su compañero, además de posición, se encargó James Harden: 39 puntos y 10 asistencias, con 10 triples, en 41 minutos para él.

Los Spurs, que terminaron perdiendo por 108-101, enseñaron las garras en un segundo cuarto donde impusieron su defensa ante uno de los equipos con mejor ofensiva. En la manga siguiente ya no pudieron contenerles: 43 puntos recibieron.

San Antonio llegó a empatar este duelo texano a falta de dos minutos con una canasta de DeMar DeRozan (28+7+8), poniendo el 99-99, pero el 9-2 de parcial final dejó la victoria amarrada en el Toyota Center.

Además de Harden, Gerald Green volvió a estar muy acertado desde el banquillo (5 triples), Clint Capela completó un doble-doble monstruoso (21+23) y P.J. Tucker también se apuntó a la moda de la captura (16 rebotes). En los Spurs continúa de baja Pau Gasol, aunque su recuperación está cerca de completarse.

Ambos equipos están ahora con la misma distancia entre victorias y derrotas, dos (17-15 a 18-16), pero que los Rockets lleven dos partidos menos disputados es lo que les mantiene por encima en la clasificación de la Conferencia Oeste.