LIGA ENDESA | ESTUDIANTES-BURGOS
Gentile se disfraza de héroe y da la tercera al Estudiantes
El italiano acabó con 22 puntos, dos de ellos a diez segundos del final para acabar con la racha de cinco derrotas de los colegiales. Huskic, tremendo. Gran ambiente en la grada.
El Movistar Estudiantes volvía al Palacio tras 21 días de ausencia y muchas dudas en la cabeza: enlazaba cinco derrotas consecutivas, no ganaba desde el pasado 20 de octubre en el Santiago Martín ante el Iberostar Tenerife. Un periodo largo y turbulento en un equipo sin aparente defensa (en esta mala racha siempre había recibido 40 o más puntos antes del descanso), ahogado en el rebote y que solo espabilaba a base de espasmos cortos y estériles. Dudas que se ponían sobre la mesa ante un rival complejo: el San Pablo Burgos y su bulliciosa afición, que no se pierde una. Otra viaje por la península para ese pequeño poblado que resiste bravo al invasor, pero que se tuvo que conformar con la lucha de los suyos y la voracidad de Huskic (19 puntos y 26 de valoración). El triunfo se le escapó de los dedos.
Porque se toparon con el mágico Gentile. El transalpino finalizó con 22 tantos, 17 de ellos en el segundo tiempo, dos a diez segundos del final para ganar el partido. Fue una auténtica obra maestra. Se puso el mundo por montera, no le tembló el pulso y dio una gran alegría a una afición estudiantil, que entre el rival en la grada y la tensión en pista, se metieron de lleno el duelo como hacía mucho que no se veía.
Y como era de prever, la fiesta comenzó en la grada antes que en la cancha. Cánticos y más cánticos de uno y otro lado daban brillantez a un partido que se empantanó en el primero cuarto: solo 29 puntos (13-16) entre ambos conjuntos, con los estudiantiles dando un paso al frente en tareas defensivas. Un gran Caner-Medley comandaba esa labor (7 rebotes en 8 minutos) ante unos burgaleses muy acertados (40% en el lanzamiento). El Movistar, mientras, no encontraba tino desde el perímetro (2 de 10). Tampoco Brizuela (0 de 4) y las las pequeñas ventajas iban y venían sin ton ni son. Del 9-4 se pasó al 13-16 y del 15-18 al 25-18. Y al punto de partida: 35-31 al descanso. Clavell tenía buenos momentos de arranque y Gentile sufría para encontrar aro. Huskic y Thompson hacían daño cerca de tablero (19 puntos y 28 de valoración combinada)... pero el San Pablo no localizaba la yugular de su rival en estos primeros 20 minutos.
Sin embargo, lo hizo nada más comenzar el segundo periodo. Parcial 2-16 en cuatro minutos y medio. En un abrir y cerrar de ojos, el Burgos sacó todas las vergüenzas locales con tres triples casi seguidos de Álex López. Del 35-31 al 37-47. Una bofetada con la mano abierta... que tuvo su réplica en el puño de Gentile. El italiano se lanzó a la desesperada, anotó once puntos en el tercer cuarto y Hakanson, con un triple estratosférico, completó la remontada antes del último episodio (55-54).
Vuelta a empezar y las revoluciones se vinieron abajo. Habían sido 55 tantos entre ambos conjuntos y tuvieron que coger aire. Respirar y empezar. El San Pablo se alimentaba desde la línea de personal y 15 de sus 25 tantos finales vinieron desde ahí. Estuvieron casi cinco minutos sin lograr una canasta en juego. Gentile mantenía el tipo y Brizuela, con su primer triple del encuentro, ponía el 78-75 a dos minutos del final. Pero faltaba esa canasta de Gentile. Pura magia. Rectificado, media vuelta y tercer triunfo para los colegiales esta temporada que Frazier, con un lanzamiento final, no pudo evitar. ¿Será un nuevo despertar?