—Cuando ganamos la Copa del Rey, inmediatamente teníamos otro objetivo que era prepararnos para el resto de la temporada regular y yo sabia que teníamos aún muchos partidos muy difíciles y la mayoría fuera de nuestra pista. Entonces se habló de que íbamos a luchar por el segundo puesto de la fase regular, pero eso no fue cierto porque nunca luchamos por esa posición.
¿Por qué motivo?
—Un equipo como el Barcelona siempre debe luchar para ser primero y ya no podía ser. A partir de ahí, ser segundo tercero o cuarto es importante y más después de una temporada muy difícil en la que han pasado muchas cosas, en la que hemos tenido lesionados y , repito, muchos partidos fuera contra equipos muy complicados.
¿Le sabe a poco ser tercero o cuarto?
—No.Cuando llegué aquí yo tenía dos objetivos: mejorar el rendimiento de los jugadores y prepararnos para los playoff por el título y lo mínimo era poder tener los cuartos de final del playoff con el factor campo a favor.
¿Mejor ser tercero que cuarto?
—Ya veremos. El Valencia es un gran equipo como nosotros que ha tenido también muchos problemas con las lesiones, pero también ha jugado bien en una larga temporada en la que ha disputado también la Euroliga y el partido es muy importante para ambos aunque cada partido, a estas alturas, es importante.
Vuelve Ud. a Valencia donde entrenó una temporada.¿Eso hace más especial el encuentro?
—Estuve una temporada allí que fue increíble y estoy muy feliz de volver otra vez a la Fuente de San Luis ante unos aficionados que siempre me apoyaron y respetaron. Y también el entrenador tiene que estar motivado en un encuentro como este y le puedo asegurar que estoy doblemente motivado para mañana.
¿Puede servir de referencia el encuentro?
—Más que referencia, el partido también es una oportunidad para ver en el momento en que estamos porque todavía tenemos problemas con algunos jugadores que no pueden jugar aún.
¿Jugará ya el pívot Jalen Reynols, su último fichaje?
—Claro. Es un chico muy educado, entiende el baloncesto y reacciona muy bien. No tenemos grandes expectativas, pero es un jugador en el banquillo para ayudar a los interiores, sobre todo a Tomic y a Oriola y estoy contento de tener un jugador que está preparado para jugar, tiene hambre, tiene objetivos y para nosotros fue muy importante encontrar un jugador que se puede identificar rápidamente con el grupo porque tenemos un buen grupo, con armonía entre todos los jugadores y estoy muy optimista al respecto.
Ni Oriola ni Sanders jugarán mañana. ¿Cómo ve esta situación?
—En el caso de Oriola, mejora cada día pero debemos esperar. Sanders ha entrenado los últimos dos o tres días después de tres meses de baja por la lesión en el hombro derecho (hoy se cumplen los tres meses) sufrida en la Copa del Rey. Para mí su vuelta será como un nuevo fichaje para nosotros.
Sin Séraphin y sin Sanders desde hace meses ¿No debería haber llegado antes el refuerzo para la plantilla?
—No, porque solo buscábamos un 'cinco' porque siempre esperamos que Rakim Sanders mejorase. Ahora mismo, él podría jugar mañana, pero necesita contacto y tocar más balón. Nosotros queríamos un 'cinco' de alto nivel y en este momento están todos en otros equipos y estamos muy contentos con el rendimiento de Tomic y Oriola, que ahora no puede jugar.
¿Es Reynolds el jugador que quería?
—Cuando empiecen los playoff tendremos de jugar muchos encuentros seguidos, prácticamente cada día, y buscamos en el mercado un jugador que tuviese las características físicas de él. Un pívot bajo (2,07 metros) con un juego muy vertical, que es muy rápido y que estuviese preparado para ayudar desde el banquillo.