ACB | GIPUZKOA 81 - FUENLABRADA 76
El GBC de Henk Norel rompe la buena racha del Fuenlabrada
Montakit Fuenlabrada dejó en estéril una remontada de nueve puntos en el tercer cuarto. Norel y Swing fueron los mejores del Gipuzkoa.
Delteco GBC logró una nueva victoria ante su afición y truncando a su vez la buena racha de Montakit Fuenlabrada. Los vascos aguantaron la remontada de los madrileños y se impusieron por 81-76.
El Gipuzkoa logra su cuarta victoria (4-6), lo que insufla aún más aire a los de Porfi Fisac. Para el Fuenla supone un pequeño receso, ya que se coloca con 7-3 para descolgarse un poco de la lucha por el liderato.
Remontada neutralizada
Jordan Swing era el foco principal de los ataques locales en el incio del encuentro. Pero no por acaparamiento, sino por acierto. El dominio en esos primeros minutos del GBC en los tableros ayudó mucho a ir incrementando el número de ataques y a que los de San Sebastián fueran sacando ventaja poco a poco. Al final del primer envite, 21-13 para los locales.
La salida de un Kenny Chery con una faceta más anotadora y menos directora hizo que esa diferencia en el marcador fuera creciendo. Los del 'Che' no estaban nada cómodos, con ideas individualistas que distan de la filosofía del argentino. Ni siquiera la defensa, seña de identidad del equipo, hacía acto de presencia. Smits se mostraba, pero la pelea estaba dentro y Agbelese alzaba la voz. El Fuenla, pese a frenar la sangría, se iba al descanso muy por debajo: 41-32.
Esos nueve puntos al final de la primera parte, que se fueron repitiendo a lo largo del tercer cuarto, fueron la máxima que tuvieron los locales. A partir de ahí sí llegó el Fuenlabrada al que estamos acostumbrados este año: reducción de puntos y con Popovic al mando de las operaciones. Progresivamente los madrileños fueron suturando la brecha y acercándose. El GBC no podía parar ya las penetraciones de Pako Cruz ni el trabajo bajo los aros de Blagota Sekulic. Al final de este tercer periodo, 56-52 en el electrónico.
Y la remontada se culminó: Cruz lo empataba y Smits ponía la ventaja. Néstor García veía como Fisac pedía tiempo muerto ante la pequeña avalancha y el argentino jaleaba a sus jugadores para terminar el trabajo. Pero no estaba todo dicho. Fisac sacó la pizarra a pasear y puso toda la carne en el asador con Henk Norel, que acabó decidiendo el duelo, como eje pivotal de los ataques. La circulación de balón mejoró en el cuadro donostiarra y eso permitió al interior neerlandés, uno de los mejores de la ACB esta temporada, romper el ritmo del rival y sentenciar el encuentro. Ni un Marko Popovic al rescate lo pudo evitar. El Fuenla tampoco encaró bien los últimos ataques, lo que facilitó que el GBC terminara en los tiros libres con el partido de forma definitiva: 81-76.