Carroll: “Mi padre me preguntaba qué me pasaba”

Laso dijo en la previa del partido ante el Unicaja que usted estaba entrenando muy bien, que en cualquier momento iba a estallar con un gran partido…
Yo tenía una sensación parecida después de una semana buena en los entrenamientos, incluso lo hablé con mi padre, que me estaba preguntando los últimos días que qué me pasaba. He tenido una buena semana y creo que las cosas me van a salir ahora mejor. Estoy contento por la victoria ante un equipo como el Unicaja que ha competido muy bien ante grandes rivales.

¿Se llega a enfadar consigo mismo cuando las cosas no le salen bien?
A veces me enfado, me siento algo frustrado, pero entiendo que estas rachas suceden, que tienen que pasar porque he tenido momentos buenos y malos durante mi carrera. No me vuelvo loco. La única manera que conozco para arreglar las cosas es trabajar.

¿Cómo explica que hayan firmado dos partidos tan buenos (Unicaja y CSKA) con tantos problemas?
Lo que nos pasó ante el CSKA fue algo muy raro y echamos mucho de menos a Kuzmic y a Randolph, y también a Thompkins que está con asuntos personales. Es una lástima, pero como equipo hemos podido dar respuesta. Radoncic y Maciulis jugaron muy bien de ‘cuatros’ ante el Unicaja. Eso es lo que buscamos, que otros jugadores puedan entrar y hacerlo bien.

El calendario no da respiro, jornada doble de Euroliga. ¿Otro reto?
Una semana dura, pero también divertida. Más partidos y menos entrenamientos y eso es divertido. Nos espera primero el Armani Milán, un equipo muy complicado. Es un rival con muchos puntos, con exteriores tiradores y penetradores. Y los interiores van bastante al tapón, rebotean, son grandes… Con nuestras bajas, el rebote será clave.