El Madrid, a un triunfo de su quinta Final Four en siete años

Pónganse en situación: tercer partido y la grada‘se incendia al ritmo de la remontada. Presión ambiental y cambio de criterio de los árbitros, más permisivos con los contactos. La hinchada repite cántico, ahora sí parece la cancha turca del tópico, suena a “Barça, Barça…” pero gritan “Daçka, Daçka…”, la abreviatura de Darussafaka. Para asegurarnos preguntamos a un periodista, pero ni era local ni turco, sino griego, y nos mira con mala cara por la confusión. Las apariencias engañan, dicen. Todos ven ya al Madrid camino de la Final Four, pero los de Blatt no han dicho la última palabra.

En los tres partidos estuvieron por debajo y en los tres recortaron muchos puntos: 16 en el último, en siete minutos. “Da igual lo que pasara antes, lo único que importa es afrontar el cuarto desafío con la mente clara y la motivación creciente”, dice el técnico estadounidense. “Queremos forzar el quinto porque allí tendrán más presión”, amenaza Moerman. El Madrid está a tiro de uno de volver a la Final Four. Sería la quinta en siete años tras faltar entre 1997 y 2010. Tan cerca que Laso no quiere ni oír hablar del colchón de un quinto encuentro: “Si levantamos el pie, malo”. Llull y Ayón frente a Wanamaker y Zizic, los mascarones de proa. Pero la clave del 2-1 es que el Madrid fue más. Más equipo y más jugadores