Pau sale tocado, pero victorioso, de la batalla ante los Heat
El español contribuyó con un 12+8 a la tercera victoria consecutiva de los Spurs. Sufre una hiperextensión en el cuello: "Está un poco dolorido".
Los Spurs sufrieron en exceso para sellar un partido (94-90) en el que llegaron a mandar por 18 (42-24 y 53-35) y en el que al descanso se fueron con un cómodo 55-40. No obstante, los Heat no bajaron los brazos en ningún momento y con un juego muy físico, aprovechando las pérdidas locales (8 acumularon en el tercer cuarto para un total de 17) y penetrando con fuerza hacia el aro con sus bajitos llegaron a inquietar a los texanos en los minutos finales. Lo que no fue suficiente para evitar su quinta derrota consecutiva. Hassan Whiteside (dominador en la pintura con 23 puntos, 17 rebotes y 2 tapones) y Dion Waiters (27 tantos en su mejor noche con Miami) apenas contaron con la aportación de Tyler Johnson (11+8+6) desde el banquillo. Lo que contrastó con la coral producción de San Antonio. Hasta cinco de sus jugadores anotaron en dobles figuras, destacando —otro día más— Kawhi Leonard: 24+12+4 aunque no tuvo su actuación más brillante de cara al aro (7/19 en tiros de campo).
Tras irse al descanso con un apenas un par de puntos en su cuenta personal, Pau Gasol fue de menos a más y acabó con 12 tantos, 8 rebotes, 2 asistencias, 1 tapón y 1 robo de balón. El español sufrió en defensa para frenar las penetraciones de los visitantes cuando Spoelstra decidió jugar pequeño. "Cuando esto ocurre, y nosotros jugamos con un quinteto más grande, tenemos que ser capaces de castigarles en ataque, limitar nuestras pérdidas y mantener nuestras ventajas. Ellos van a tratar de jugar el pick and roll, buscar cambios defensivos para sacar ventaja y lanzar triples", analizó el pívot español, quien se marchó con secuelas de la batalla. Gasol sufre una hiperextensión en el cuello. "Estoy un poco dolorido", admitió. Un percance que se produjo en un contraataque tras un choque con Waiters. El catalán logró anotar la bandeja, pero aunque hubo contacto por parte del escolta y el catalán acabó en el suelo, los árbitros no pitaron la personal. "Sacan ventaja del mucho contacto con el que juegan. Tanto, que obligarían a parar el partido muy a menudo. Es duro, pero toca centrarnos en nuestro juego y seguir hacia delante. Es lo que hay", explicó tras el encuentro. Un incidente que hizo que tanto el escolta (a quien se le ve especialmente motivado contra los Spurs, acuérdense de los Playoffs del año pasado en la serie ante los Thunder, su exequipo) y el español tuvieran un intercambio de pareceres.
Aunque el de Sant Boi se 'vengó' poco después con una clarísima falta en ataque sobre Justise Winslow que los colegiados pasaron por alto. Una acción que desembocó en un triple frontal de Patty Mills y una técnica a Spoelstra por protestar que puso a los texanos 12 arriba a 3:48 para la conclusión. "Se cayó, Debe haberse resbalado o algo. Yo estaba manteniendo mi posición y se fue el suelo. A veces pasa", bromeó Pau ante los periodistas.
Más allá del movido y feo duelo (anotación baja y mirilla desviada en ambos equipos, si bien a los locales les salvó su 8/15 en triples), el encuentro sirvió para que el AT&T Center viera por segunda vez (tercera del curso, con 11 partidos ya disputados) el que debe ser el quinteto natural titular de los Spurs. El que forman Parker, Danny Green (quien apenas jugó un cuarto de hora por sus molestias en la rodilla), Kawhi, LaMarcus y Gasol. Ahora, Popovich y sus chicos ponen rumbo a California. Allí esperan los Kings y los 'Baby Lakers' de Luke Walton. Dos nuevas pruebas para seguir mejorando la química en el grupo. Esto no para.