VALENCIA - REAL MADRID (21:00, C+D) (1-2)
El tercer partido no se repite y el Valencia llega al cuarto al límite
El Juez Único ha desestimado las alegaciones del Madrid por la falta cometida por Thompkins pero apuntada al expulsado Llull. Si Diot no puede jugar, Vives será el único base local.
El Real Madrid solicitó el miércoles la repetición del tercer partido desde la expulsión de Llull (a 7:50 del final del último cuarto). Fue eliminado tras recibir una técnica y cuatro faltas, una de ellas cometida por Thompkins, justo al cierre de la primera parte, pero asignada al base por error. La mesa cambió el dorsal (en vez del 33 del pívot anotó el 23 de Llull) y el Madrid quiso firmar el martes el acta bajo protesta, pero se cerró antes. Al día siguiente presentó sus alegaciones y este mismo viernes, horas antes del cuarto duelo (2-1 vencen los blancos), el Juez Único desestimó la petición del Madrid. Ni se repetirá el tercer encuentro ni se aplicarán medidas cautelares contra el comisario.
Hace justo un año, en esta misma semifinal, el Valencia denunció la alineación indebida de Slaughter tras un fallo de la mesa, otro, aunque con distinto comisario. El americano no aparecía inicialmente en el acta pese a que el delegado madridista había presentado su ficha.
La polémica ha llegado puntual a la cita del playoff y embadurnará el cuarto asalto, de nuevo en la Fonteta (21:00, Canal+ Deportes). Fervor disparado y un Valencia Basket al límite de todo: sin Rafa Martínez, sin Shurna (operado de una fractura en el húmero) y con la duda de Diot (el martes apenas aguantó cinco minutos por una sobrecarga en el muslo). Van Rossom y Sikma habían caído antes.
Cinco bajas, o cuatro y media si contamos aún a Diot, que formarían un quinteto muy válido. Si el base francés no puede echar una mano, Guillem Vives será el único director de juego. Pedro Martínez ya probó sin éxito a Stefansson en ese puesto. ¿San Emeterio? A ver.
Lucic volverá a jugar de falso pívot y un Sato rejuvenecido se las verá con Rudy, que viene de su mejor actuación del curso (27 de valoración). La artillería blanca no abrió fuego esta vez en el último cuarto. Nocioni firmó un buen final, aunque falló una canasta clave. Una de las seis que erró el Madrid antes de llegar a la prórroga: no anotó en los últimos 3:20. Y luego en el tiempo extra desperdició siete tantos de ventaja (76-83) en los últimos 150 segundos. Sergio Rodríguez aún no ha dado su nivel en la serie y Llull se perdió los últimos 13 minutos por la expulsión.
La guinda vino en forma de canastón, el de Vives. Pitarle pasos hubiera sido hilar muy fino. Pura pasión