DOMINION BILBAO 55 - BARCELONA LASSA 77
El Bilbao se hunde en el último cuarto y Tomic asoma la cabeza
El Dominion dio guerra al líder hasta el último cuarto: 12-29. En el Barça vuelve la mejor versión del croata: 16 puntos y 14 rebotes. Pascual, sobre Arroyo: “Todos los chicos quieren jugar”.
El Barcelona asoma la cabeza ligeramente desde el subsuelo. Hundido como estaba tras el varapalo de Krasnodar, ha aprovechado dos partidos ante rivales vascos fieros para ver algo de luz, aunque no apaga la amargura. Ni los incendios. Tras caer en la Euroliga, en 80 minutos ante el Baskonia y Bilbao jamás ha estado por debajo en el marcador, como se encargó de remarcar Xavi Pascual, y eso ha sido un alivio para mentes tan apesadumbradas. Arroyo añadió más leña al fuego cargando dos días atrás contra el técnico culé y éste templó arrojando un jarro de agua amparado en la victoria en Miribilla: “Todos los chicos quieren jugar, no hay jugador al que no le guste. Es la ambición y lo que hace que tengan estas carreras, es normal”. Lo cierto es que la campaña del puertorriqueño está siendo nefasta. Y Pascual lo sacó a flote: “Es como la del equipo, no acabamos de ganar títulos; si se consiguen victorias todos lo hacemos bien y si no, no. Está al nivel de todos”.
El Bilbao se desplomó en el momento más inesperado, tras hacer lo difícil, cuando había llevado el partido al terreno que le gustaba: 41-42, a falta de 12:39 (antes tuvo un 33-34). Tuvo dos balones para ponerse por arriba y al no lograrlo, su desplome fue paralelo a la forma de coserse al juego del equipo azulgrana. Se fue en volandas de la mano de Abrines y con el mejor Tomic de la temporada. Mató dos pájaros de un tiro el Barça: rompió una racha de cuatro años sin asaltar un feudo que le da escalofríos como Miribilla y resolvió casi por completo el liderato.
Al Dominion no se le puede reprochar nada durante esos 28 minutos. Fue puro convencimiento, aunque tuvo mucho de desacierto. Encima está sin Bertans, que tiene la espalda destrozada y tuvo que ser infiltrado tres veces. El recuerdo de la Copa estuvo muy fresco durante esa media hora de juego neto. Lo curioso es que en aquella cita de A Coruña, los vizcaínos estaban en tanga en cuanto a juego interior y ahora tienen hombres grandes para llenar dos traineras. Le toca sudar para entrar en el playoff. Mumbrú, en el récord de partidos ACB del club, trató de ejercer de líder de nuevo desde el poste, pero Perperoglou se las sabe todas, casi tantas como él. Fue Hannah el que encendió la chispa saliendo del banquillo. Si el Barça Lassa no andaba muy allá en los lanzamientos en la primera mitad (3/12 en triples), lo de los bilbaínos era para que se lo mirasen en los vestuarios (8/30 en tiros de campo; 7/22 en dobles y 1/8 en el arco). Anotar era una aventura. Negados como estaban en ataque, cavaron una trinchera atrás para tener opciones. En este Barça, el más vulgar de la era Pascual, meter más de 70 es para medalla de oro; el Dominion sucumbió ante los recursos y la labor de desgate defensiva. Se vio impotente, vacío al no poder ponerse por encima y le cayó otro de esos parciales dolorosos. Eso sí, el equipo catalán tuvo que tirar de minutadas de hombres principales para salir a flote. Abrines, que Venzenkov al margen fue la última rotación y salió al rescate en el instante preciso.
El Bilbao ha anunciado para finales de mes una junta extraordinaria para analizar cómo ha ido la ampliación de capital y las medidas que se deben tomar a raíz de la misma. Se analizará la situación patrimonial en el intento por reflotar la nave tras el agujero que existía casi dos años atrás.