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GALATASARAY - GRAN CANARIA

El Galatasaray de McCollum espera a un crecido Granca

El base fue el artífice del pase a semifinales del equipo turco, que este miércoles recibe al Granca (19:00). La vuelta en una semana.

Alen Omic.
DIARIO AS

Para ciudad mestiza, Estambul, que es de paso la más poblada de Europa. Mezcla de culturas, puente de unión de Europa y Asia a través del Bósforo, último resquicio del Viejo Continente. Dicen que allí anida un infierno, de esos que te encogen y cortan el aliento. De esos que, además, multiplican por infinito la motivación de quién allí se encuentre. Se llama Abdi Ipecki Arena y ahí anida desde el lunes un equipo venido de una minúscula isla en la otra punta del continente para evaporar esa olla a presión.

La guarida del Galatasaray impresiona, sin duda, de tanto que retumban los gritos de 12.000 fervorosos aficionados. No al Herbalife Gran Canaria, que el curso pasado, en su visita al Darussafaka, trituró a su rival bajo un ambiente no menos infernal. Entre las muchas virtudes del grupo de Aíto García Reneses destaca una madurez competitiva que le lleva a sobreponerse a los agentes externos más devastadores, tales como un gigantesco pabellón en contra o el tumor cerebral de Kuric, mismamente. Un Kuric que, además, está presente en la expedición insular que aterrizó en Turquía el lunes.

Tras la completa integración de Savané, como así demostró el propio interior senegalés el domingo contra el Laboral Kutxa, el Granca cuenta con el equipo al completo, una vez recuperado también Oriol Paulí. Acude, por tanto, cargado de pastillas contra el infierno ajeno.

Mientras, el Galatasaray comparece en esta primera cita de semifinales tras haberse medido en cuartos con el Bayern Munich, al que se vio obligado a remontar (99-89 en Alemania, 72-59 en Turquía). Con el histórico Ergin Ataman en el banquillo, cuenta en su plantilla con estrellas del basket otomano como el base Guler, así como las referencias del alero serbio Micov, con pasado ACB en Vitoria, o los alapívots Caleb Green, quien jugara el curso pasado en el Unicaja de Málaga, y Stephane Lasme. Asimismo, Pangos y Oliver tendrán doble trabajo en defensa con el poderío físico del base norteamericano Erric McCollum, decisivo para la clasificación otomana. El Herbalife no volverá a Gran Canaria hasta el domingo, pues desde Estambul viajará directamente a Santiago de Compostela, donde el sábado le espera el Obradoiro.