SAN ANTONIO SPURS 109-CHICAGO BULLS 101

Pau Gasol no evita que los Spurs sigan haciendo historia

El equipo texano eleva su arranque en casa a 31-0 y logran su 19ª temporada con 55 o más victorias. El español, 'doble-doble' con 21 puntos y 12 rebotes.

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NBA

Los San Antonio Spurs siguen su imparable camino en la historia de la NBA. Las franquicias que han mantenido la constancia histórica de los texanos se pueden contar con los dedos de una mano y puede que sobren dedos. El desarrollo sostenible en el tiempo de un proyecto, más la unión ya eterna entre Popovich y Duncan, han convertido a los Spurs en el mejor equipo del siglo XXI: 18 temporadas seguidas en playoffs (19 con esta), 19 campañas ya con 55 o más victorias (cuatro seguidas con la presente), solo una por detrás de los Lakers, cinco anillos desde 1999... Récords y marcas imposibles sólo al alcance de organizaciones asentadas y bien estructuras, que no se vuelven locas cuando vienen mal dadas. Miden, estudian y actúan en consecuencia. La grandeza.

Con la victoria de esta madrugada ante los Chicago Bulls (109-101) aumentan su leyenda. Establecieron su mejor marca de la temporada en los primeros 65 partidos (55-10) y han elevado a 31-0 su invencibilidad en casa este curso, 40-0 si unimos la anterior campaña. La última vez que el AT&T Center vio doblar la rodilla a los suyos fue el 12 de marzo de 2015 frente a unos Cleveland Cavaliers que necesitaron de una prórroga para robar la victoria de Texas. Ante la franquicia de Illinois las cosas no fueron fáciles. No fue un simple paseo. Los Bulls, apremiados por un puesto en playoffs que han vuelto a perder hoy en favor de los Pistons, salieron convencidos de poder asaltar ese pabellón inexpugnable. Y esa idea sin Butler. El escolta continúa con sus molestias en la rodilla y aunque no son de mucha gravedad, le han mantenido fuera de combate en cinco de los últimos seis partidos (segundo consecutivo el de hoy).

Sin Butler, los Bulls plantaron cara a un equipo cuyas proezas esta temporada están en segundo plano por la sombra alargada de los increíbles Warriors. Apoyados en Pau Gasol, Derrick Rose y E'Twaun Moore, los de Chicago resistieron hasta el último cuarto. El primer cuarto marcó empate (27-27), el descanso una pequeña desventaja de 7 (54-47) y el final del tercer cuarto de 10 (84-74). Todo en un pañuelo. Los pupilos de Hoiberg (que recibió su primer técnica en la NBA tanto a nivel entrenador como jugador, es decir, tras 628 partidos) resistieron estoicos seis minutos más en los que el marcador se movía en una horquilla de no más de 6 puntos de diferencia. Resistían con un español que alcanzó su 37º doble-doble del curso con 21 puntos (8-16) y 12 rebotes. Además, elevó su cifra personal de triples en los Bulls hasta los 31. A uno de los que logró en su etapa en el Barcelona, 14 por encima de los que consiguió en Memphis y 10 más que en Los Ángeles (fuente Alberto de Roa). Rose, por su parte, finalizó también con 21, aunque volvió a su senda horrenda de tiro (9/21). Moore continúa con su buena racha de días atrás: 20 tantos y 4/5 en el perímetro.

En días normales, todo esto habría bastado. Incluso las 21 perdidas hubieran sido sólo un mal sueño. Pero ante estos Spurs y con Leonard delante, no. El MVP de las Finales de 2014 estuvo, como siempre, como es constante, sensacional. Tuvo 29 puntos (tres más que Aldridge) y demostró que su evolución desde el triple es imparable. Frente a Chicago acertó 4 de sus 5 tiros. Su porcentaje (46,6%) de tiro es mejor que de Curry (45,9%), por ejemplo. Su ejemplo dio frutos y un mate de Green puso el insalvable 102-92 a cuatro minutos del final de un encuentro que elevó a Duncan un poco más en esa historia de la Liga que también él escribe en cada duelo. El ala-pívot superó la barrera de los 15.000 rebotes y es el sexto jugador que lo logra. Historia viva del baloncesto. Si no estuvieran los Warriors...