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CHICAGO BULLS 126-LOS ANGELES LAKERS 115

Gasol coge aire en el último día de Kobe en la casa de Jordan

Los Bulls no encadenaban dos victorias consecutivas desde el pasado 8 de enero. El escolta angelino se despidió como profesional en Chicago.

Pau Gasol se abraza a Kobe Bryant.
Pau Gasol se abraza a Kobe Bryant.JONATHAN DANIELAFP

El United Center no volverá a ver en juego a Kobe Bryant. Esta madrugada fue el último encuentro de la estrella de esta generación, la generación post-Jordan, como profesional en Chicago. La casa del mítico 23 de los Bulls dio la bienvenida y despidió al 24 angelino como se merece, por todo lo alto, con vídeo de presentación muy especial de la mano (o la voz) de su hermano y amigo Pau Gasol, con abrazos y gritos de homenaje a un escolta que ha disputado 15 partidos en Chicago en sus 20 temporadas en la NBA. Las lesiones de los últimos años han impedido disfrutarlo mucho más. Una lástima.

Siempre quedará para el recuerdo su primer duelo ante MJ, aquel 17 de diciembre de 1996, en su año de rookie. Él anotaría 5 puntos, su His Airness acabó con 30 y victoria. Pero aún más especial fue el siguiente. Justamente un año después, con una batalla épica. El joven Kobe se subió a las barbas del todopoderoso Jordan al lograr 33 tantos en 29 minutos desde el banquillo. Jordan respondió con 36 puntos que valieron un triunfo. Fue uno de los grandes capítulos de la NBA... y de la obsesión de Bryant por emular al más grande de todos los tiempos. El jugador de Philadelphia se retirará con un anillo menos que Air. Muy cerca, demasiado cerca. Una pena.

Con esta fiesta, el partido habría quedado en un segundo plano si los Bulls no se hubieran empeñado en caer en el Este. El equipo de Hoiberg afronta, en estos momentos, cada duelo como si fuera una final. Y es así porque a pesar de la victoria ante Los Angeles Lakers (126-115) siguen octavos, empatados con los Hornets (séptimos). La derrota de los Pistons les da algo más de aire. Y todavía más, el encadenar dos triunfos consecutivos por primera vez desde el 8 de enero. A pesar de ello, el balance de los últimos 15 partidos es 5-10. Demasiadas derrotas para uno de los grandes de su Conferencia.

Los Bulls tienen que hacer esfuerzos mayúsculos para hacerse con los duelos por su situación en la clasificación y por las lesiones (Butler, Noah y Mirotic). Los angelinos, un equipo más centrado en la reconstrucción que en ganar, les pusieron en más apuros de los esperados. Así, con Randle y Bryant golpeando con 22 tantos, cada uno de ellos, y Clarkson con 20, los Lakers lograron llegar a mediados del tercer cuarto empatados (66-66, 9:30) y al final del partido casi igualados (110-107). Los tirones que daban los locales por medio de Rose y Moore, 24 tantos respectivamente, y Pau Gasol (22 y 7 rebotes) no fueron definitivos hasta el último parcial 16-8. 

"Estoy animado con lo que hacemos en ataque. La pelota se mueve mucho mejor que a principios de la temporada", reflexionó Hoiberg, entrenador de los Bulls, que confirmó que Mirotic sigue con dolor en el abdomen. Kobe, por su parte, indicó que Chicago no tendrán problemas en llegar a playoffs, siempre que mejoren en defensa, un hecho difícil de lograr sin Butler. Con el escolta lesionado sucedió la anécdota del día, pues en el tercer cuarto, Bryant se pasó la mitad de una posesión hablando con él. Pasado y Futuro. Magia.

Para llevarse el partido, la franquicia de los seis anillos tuvo que tirar de cierta épica. Puesto que por primera vez en su historia lanzaron con al menos un 55% en tiros de campo, un 65% (13-19) desde el triple (cabe destacar el 3/3 de Portis y el 3/4 de McDermott, claves desde el banquillo) y un 95% en la línea de personal. Y esto fue así porque permitieron 34 tantos de los Lakers en el cuarto cuarto, provocando que una +19 cayera hasta un +3, logrando que por primera vez en seis años sus rivales hagan 100 o más puntos en 10 partidos seguidos. Vamos, que o la defensa mejora, o de nada servirá estos momentos de épica. Y no lo digo yo. Lo dice Kobe. Algo sabrá de esto, ¿no?