Kobe se despide de Portland, su ciudad NBA maldita: 12-29

En la histórica temporada de su adiós, Kobe Bryant visitó por última vez el Rose Garden (ahora conocido como Moda Center). Lo de menos fue el resultado: un claro triunfo para los Blazers por 121-103. Una derrota que le deja con un balance de 12-29 en Portland a lo largo de su carrera entre Regular Season y Playoffs. Dejando a un margen "las batallas" de postemporada, se despide de la lluviosa Oregón con un récord de 6-26 en RS: el peor de su carrera en cualquier ciudad. Multitud de recuerdos los que guardará de una de las canchas más complicadas de toda la NBA. Uno de ellos pertencerá a lo vivido en esta última madrugada. Durante el partido, un aficionado a pie de pista le dijo: "Tío, voy a echar de menos el odiarte". "Gracias, yo extrañaré el que me encante saber que me odias", replicó el '24'.

Y eso que para decirle adiós, al pabellón acudieron numerosos seguidores de los Lakers. Lo que no acabo de agradarle a Terry Stotts, el técnico local. "Me gusta que le mostraran su aprecio a Kobe, pero para mi gusto quizá hubo demasiados", destacó. Una circunstancia que 'The Black Mamba' no hubiese imaginado ni de lejos allá por el año 2000, cuando camino del primero de sus cinco anillos se midió a la Rip City en la final de la Conferencia Oeste. Han pasado 16 años desde entonces, pero no olvida aquel tapón que le colocó en el último segundo a Arvydas Sabonis en el Game 3 de la serie (91-93). "Todavía me acuerdo de lo que sentí. Fue un momento crucial de aquella serie, un bonito recuerdo. Aún era un bebé, tenía 20 o 21 años y llevaba el pelo a lo afro", explicó. 

Damian Lillard

Mucho ha llovido desde entonces. Ambos equipos viven sendos procesos de reconstrucción en pos de poder protagonizar nuevos enfrentamientos por el campeonato en el futuro. Para ello, en Portland cuentan con Damian Lillard, quien precisamente jugó un partidazo al anotar 36 puntos con una serie de 14/19 en tiros de campo. "Jugar contra Kobe (10 tantos en 25 minutos) y conocerle ha sido un placer", admitió el base. Seguramente tampoco olvide el capote del escolta. "¿Si debería ir al All Star? Por supuesto que sí", comentó. No olvidemos que el Partido de las Estrellas de Toronto será su último. El de su homenaje.

Kobe, molesto

Más allá de la emotividad que tuvo su última actuación en Portland, los Lakers volvieron a completar un mal encuentro que hizo que los angelinos encadenasen su sexta derrota consecutiva. Lo que no gustó al propio Kobe. Según el periodista Mark Medina, el jugador abroncó a sus compañeros tras la derrota y les recriminó las sonrisas que algunos exhibían en su rostro. Se mostró especialmente molesto con Julius Randle y D'Angelo Russell (dos de los hombres llamados a llevar el peso de los de púrpura y oro en las temporadas venideras), a quienes se dirigió por sus nombres.