El UCAM Murcia venció con comodidad al Montakit Fuenlabrada en un partido en el que los de Katsikaris necesitaban la victoria para seguir con vida en la pelea por la Copa, mientras que los madrileños llegaban con el mismo objetivo, aunque mejor posicionado. Y el duelo se quedó en Murcia, ya que los locales ganaron con comodidad gracias a un gran primer cuarto, avivando de nuevo ese sueño de la Copa. Y es que ya en el primer cuarto el UCAM se lanzó en el marcador con un parcial de 20-3. Montakit, eso sí, no le perdió la cara al encuentro gracias a los triples de Popovic (el único que estuvo a la altura del partido).

Pero los de Cuspinera solo fueron capaces de inquietar a los locales en el segundo cuarto, cuando se llegaron a poner a siete puntos. Pero fue remar para nada, porque Murcia, liderado por su capitán Antelo, bien acompañado por Benite y Radovic (también buenos momentos de Campado y Faverani) siempre metía una marcha más cuando los madrileños se acercaban. La historia del partido se acabó al final del tercer cuarto cuando la ventaja local superó otra vez los 20 puntos. El gran partido de todo el UCAM Murcia (sólo Wood apenas apareció) sirvió para que los murcianos sumen su sexta victoria de la temporada y mantengan vivo ese sueño copero en el que todavía sigue creyendo un Montakit que en Murcia estuvo lejos de su mejor nivel, ese que le ha hecho vivir prácticamente todo el año en puestos de Copa del Rey.

Al final, el 99-75 del marcador refleja lo que fue, posiblemente, el mejor partido en equipo de un UCAM Murcia que con la llegada de Faverani parece haber dado ese salto de calidad para poder pelear por acabar entre los ocho primeros. La asignatura pendiente de los dos equipos para ser candidatos reales a la Copa está en los partidos como visitante. Si mejoran ahí, el sueño podría estar más cerca.