HERBALIFE GRAN CANARIA 83 - ALBA BERLIN 78
La vida es bella con Pangos
El base vuelve a liderar el triunfo del Granca tras un nuevo recital (23 puntos). Omic, de nuevo colosal (15 puntos, 9 rebotes), y Aíto regresó al banquillo.
Sufriendo sabe mejor. Hasta el final tuvo que esperar el Gran Canaria para abrochar, ante un peleón ALBA Berlín, su séptima victoria europea del curso. Y liderato al canto del Grupo B. Fue el alemán un equipo peleón, incansable, acaso de carácter obstinado, siempre con opciones de triunfo. Pero esta vez la moneda le regaló la cara al Herbalife.
Pese a que empezó perdiendo, 0-2, el Herbalife saltó a la cancha en estampida. Tanto es así que, muy pronto, Sasa Obradovic tuvo que parar el duelo tras una canasta de Pangos (11-4), que ya empezaba a desmelenarse. Por aquel entonces, apenas 4 minutos, Galdikas se comía el mundo, cuando más se le discutía, en su primer partido como titular (4 puntos, 6 rebotes, 1 asistencia y 13 créditos de valoración en el primer tiempo). Sin duda, aprovechó la ocasión el gigante lituano para reinvidicarse ante Aíto García Reneses, que volvía al banquillo grancanario tras dos partidos de ausencia tras ser intervenido de piedras en el riñón. Rabaseda puso el +10 desde el tiro libre, 16-6, pero el ALBA, testarudo carácter alemán, no se rindió y clausuró el periodo inicial con un 2+1 de Loncar y todas las opciones de remontar. (21-17).
Akpinar consumó la escalada poco después (25-26). El Granca coronó un parcial de 8-0 con triple de Oliver para tomar un respiro, 33-26, pero la formación germana jamás perdió comba y dejó todo por decidir al descanso (39-38).
Con varios triples y alguna asistencia espectacular, el festín que se dio Kevin Pangos en el tercer cuarto fue tremendo, aunque no suficiente para matar el partido (63-61 a falta de diez minutos). Antes, un 2+1 hercúleo de Omic le había dado al Gran Canaria su máxima a favor hasta el momento, 59-46, pero el ALBA, aprovechando el respiro en el banquillo que se dio el propio Pangos, cambió las tornas con un importante 4-15 a favor.
Habría que esperar hasta el último minuto para conocer al ganador de contienda. El ALBA se puso 64-67, pero Newley templó acto seguido los nervios locales con un triple. Pangos, desde idéntica distancia, le dio al ventaja una ventaja que no volvió a perder (70-69). El equipo amarillo supo entonces esperar su momento para que Oliver, Pangos y Omic sentenciaran desde el tiro libre un partido de los que curten. Bien es cierto, además, que con Pangos la vida es bella.