Grecia aplasta a Bélgica y ya espera a España en cuartos

Grecia metió la quinta marcha en el tercer cuarto y dejó a Bélgica a años luz (75-54 fue el marcador final). Hubo dos partidos en el Pierre-Mauroy. El primero duró hasta el descanso (34-31) y permitió a los belgas imponer un ritmo trabado que les reafirmó en sus opciones de dar la campanada. Tras la reanudación, el guión dio un giro de 180º: los helenos empezaron a correr, pero sobe todo aumentaron la intensidad en defensa. A los de Steelers se les fundieron entonces los plomos.  

Grecia compareció dormida, en buena parte debido al plomizo tempo que logró imponer su rival. Únicamente Koufos dio la impresión de haberse despegado las sábanas en los primeros minutos. Aún así, los griegos fueron por delante en el marcador, aunque sin romperlo. Pero tras la reanudación todo cambió. Una aparición fugaz de Antetokounmpo trajo consigo los primeros despegues serios (40-33, 44-36), pero entonces hicieron acto de presencia Van Rossom y Gillet (precisamente, los mejores de su equipo) para con sendos triples manter a Bélgica a flote.

Pero ya lo dice el refrán, a la tercera fue la vencida y Spanoulis (parece reservarse para desafíos mayores) se levantó para anotar una canasta lejana y colocar el 51-41 en el marcador. Ahí, los belgas comenzaron a ondear la bandera blanca, sin posibilidad alguna de frenar la superioridad de centímetros de los pívots helenos (Bourousis, emparejado muchos minutos con Hervelle, hizo mucho daño). Fin de la historia. Grecia ya espera a España en cuartos.