El Real Madrid y la historia se alían contra el Barcelona

El Madrid se abraza a la historia y el Barcelona intenta cambiarla. No es un resumen del baloncesto español, solo una visión de esta eliminatoria. Porque la historia dice que nunca nadie remontó un 1-0 en una final a cinco partidos con el factor pista en contra. Nunca.­ En 18 ocasiones el equipo local se adelantó 1-0 y en las 18 acabó celebrando el título. Es la tiranía del primer partido que permanece inmutable.

Contra eso y contra sus intermitencias luchará el Barça. También contra su falta de nervio en la pintura, que no de calidad, y su gestión poco convincente de los finales de partido. El Madrid ha demostrado hasta hoy ser mejor en los duelos directos (5-2) y además tiene a Rudy, que sirve para un roto y para un descosido. El viernes anotó 17 puntos, incluidos dos tiros libres decisivos, y cortó en los últimos tres minutos con su defensa el efecto Hezonja (récord de precocidad: 18 tantos en una final con 20 años, más que Ricky­ y Gasol).

El croata puede ser el arma inopinada culé para forzar el empate, aunque Pascual se agarra más al esperado resurgir de Tomic. Enfrente tendrá de nuevo a Ayón y a Reyes, a Slaughter­. Y su equipo a los Sergios y a un Rudy con achaques, pero que promedia 16,3 puntos, 4,8 rebotes, 3,3 asistencias, 2,5 robos y 22,7 de valoración ante el Barça esta campaña. Navarro es seria duda (fascia plantar), mientras Ayón jugará mermado con la misma dolencia.