ROCKETS 115 - CLIPPERS 109 (1-1)
Los Rockets evitan el 0-2 con récord de tiros libres
Los 64 que lanzó Houston es la mayor marca de un equipo en un partido de Playoffs desde 1993. Los Clippers volvieron a jugar sin Chris Paul.
64 tiros libres. Ni uno más, ni uno menos lanzaron los Houston Rockets. La mayor marca registrada en un partido de Playoffs desde el año 1993. 15 intentó James Harden y 21 Dwight Howard, el primero gracias a sus penetraciones; el segundo, por pura estrategia rival. No jugó Chris Paul, aún con dolores en la pierna tras forzar ante los Spurs. Si alguien dudaba de su 'jugada' yéndose al vestuario del Staples Center en ese heroico séptimo encuentro, parece que aquí tiene razones para convencerse de que el base no fingía.
Gracias a las faltas el duelo se hizo largo, muy largo. Superó las tres horas de duración y Adam Silver tiene que estar contento en casa, en una época donde todo el mundo aboga por recortar la longitud de los partidos.
Comenzaron bien los Clippers, superando de nuevo la baja de Paul y poniendo su presente sobre los hombros de Blake Griffin. El ala-pívot está en el mejor momento de su carrera. Mejor que el año pasado, cuando acabó tercero en la carrera por el MVP, y en el punto de forma ideal después de una temporada irregular. Promedia 25,4 puntos, 13,4 rebotes y 7,7 asistencias, números que en los Playoffs sólo había logrado Oscar Robertson. Llegó al descanso del Toyota Center con unos tremendos 26 puntos y con los angelinos nueve arriba. Con el intermedio se apagó (ocho puntos) y los Rockets, y en concreto Dwight Howard (16-12), despertaron.
El pívot lideró un parcial de 14-3 y Harden se encargó de confirmar la remontada en el último cuarto. El escolta acabó con 32 puntos, 15 de ellos desde la línea de tiros libres, y 16 tantos en los últimos doce minutos. Le ayudó un gran Trevor Ariza, que a pesar de su mal día en los triples (1 de 5), anotó el que ponía dos arriba a los Rockets (90-89) a 10 del final. A partir de ahí, tiros libres: Harden, Howard, Brewer... hasta 11 puntos anotó Houston desde la línea en los últimos 7'. Sólo Harden (dos) y Terrence Jones lograron canastas en juego.
La serie viaja ahora a Los Angeles, (madrugada del viernes al sábado) con la más que probable vuelta de Chris Paul y con unos Rockets con problemas para crear juego. Están consiguiendo parar las penetraciones de Harden y ese pick&roll entre Josh Smith y Dwight Howard. Con Blake Griffin desatado y un Chris Paul descansado, el Staples puede poner tierra de por medio en estas apasionantes semifinales de la Conferencia Oeste.