La rodilla de Spanoulis tiene en vilo al Olympiacos. El equipo griego sabe que sus opciones quedan reducidas a la mínima expresión sin su gran estrella o con una versión tan mala de ella como la del miércoles, en la que el escolta se quedó en un punto y -8 de valoración, un guarismo al que no caía desde el 30 de enero de 2014, en partido ante el Unicaja.

Ese -8 contrastó con el 8 de valoración de un Navarro que resultó decisivo en el despegue azulgrana del tercer cuarto. Navarro superó a Spanoulis en el duelo de leyendas continentales (primer y tercer máximos anotadores de la historia de la Euroliga) y domina la serie de enfrentamientos cara a cara por un incontestable 7-1.

Eso sí, la única vez que Spanoulis se impuso fue sonada: semifinales de la Final Four de 2012, antesala del título para los atenienses. En total, Spanoulis pierde 7-3 su serie de duelos ante el Barcelona, pero los otros dos triunfos llegaron cuando todavía jugaba en Panathinaikos y cuando Navarro estaba en la NBA (2007-08) y todavía no se habían medido en el baloncesto de clubes. Desde entonces, el domino de Navarro es casi absoluto.