Pablo Laso encontró en el quinteto Llull, Rudy, Maciulis, Felipe y Ayón la estabilidad defensiva que necesitaba el Madrid al principio del tercer cuarto, en el que entró perdiendo 52-46 y de que salió con un espectacular parcial 8-25 que decidió la segunda semifinal de la Copa. La nota negativa fue Nocioni, que se retiró tocado con problemas físicos. Las luces se le empiezan a encender al actual campeón. Sergio está clarividente y anotador, Llull anota desbocadamente y a Rudy no le hizo falta ni exprimirse al máximo después de ser uno de los mejores en la primera parte. Ayón, más en la Copa que Bourousis, también hizo sus números y Maciulis lideró la intendencia. El Madrid aparenta llegar en un buen momento físico y mental a la final. Y de acierto. Su porcentaje en triples (16/25) resultó espectacular. En tiros de dos también estuvo en un 50 por ciento (21/42).

Este fue el uno por uno. Entre paréntesis, la valoración de cada jugador.

KC Rivers (4). Menos protagonista que el primer día, se estrelló en alguna acción individual y tuvo desaplicaciones en defensa. Laso vio más fresco a Maciulis y decidió tener más tiempo en la cancha al lituano. Salió en el último cuarto con el partido ya encarrilado y dejó un buen triple desde la esquina.

Rudy Fernández (15). El pilar del Madrid y, posiblemente, uno de los favoritos a ganar el MVP de la Copa del si el Madrid fuera campeón junto a Sergio Llull, no necesitó de su mejor versión ni gastar fuerzas con vistas a la final. Mantuvo al Madrid en los dos primeros cuartos y cedió el protagonismo anotador a Sergio y Llull. Tuvo los últimos minutos para descansar.

Andrés Nocioni (4). Esta vez sí estuvo acertado en el triple (3/3) y se pudo quitar la espina del partido de cuartos ante el CAI, en el que no dio una. Ayudó al Madrid en momentos más oscuros de la primera parte. Eso sí, ha perdido velocidad y ciertos reflejos. Se llevó el tapón de la noche. Se lo puso Miralles. Se retiró lesionado.

Campazzo (1). Esta vez Laso le encontró un huequecito en el segundo cuarto para que formase parte de la rotación, aunque su aportación fue casi testimonial en cuatro minutos.

Maciulis (5). Buen jugador de equipo. Hace todo con mucho sentido, tira cuando tiene que tirar y mira más por sus compañeros que por él. Estuvo en la pista en el momento en el que Madrid hizo el break. Buena aportación. Sólo coincidió con Rivers en la pista en los últimos minutos del partido. Su valoración no dice todo lo bueno que hizo por sus compañeros.

Felipe Reyes (14). En su línea. Después de una primera parte gris, a tono con el equipo, se entonó en la segunda parte y formó parte de la unidad defensiva que asfixió a la Penya hasta dejarla sin alternativas. También hizo sus cositas en ataque, tantas como 11 puntos en 23 minutos en pista.

Sergio Rodríguez (19). De lo más rescatable en la primera parte de un Madrid que sesteaba y en la que anotó siete puntos y dio cuatro asistencias. De vuelta a la pista hizo otros dos triples para redondear sus números. Si el canario, que vuelve a su mejor nivel, Llull y Rudy están en esa línea, el Barça lo tendrá muy difícil para ser campeón.

Gustavo Ayón (15). Está manteniendo cierta regularidad en la Copa. Otra vez importante para enderezar el rumbo del Madrid en el tercer cuarto, que empezó perdiendo el tercer cuarto y en el mismo rompió el partido. Ahora mismo, por delante de Bourousis en las preferencias de Laso. Le espera un papel protagonista en la final intentando parar a Tomic, uno de los grandes peligros del Barça.

Jaycee Carroll (3). Su papel ya lo estaba haciendo Llull por él, así que vio la mayoría del partido en el banquillo. Le dio el relevo para que el mallorquín recibiese la ovación del público en los dos últimos minutos de partido.

Sergio Llull (23). Una actuación inmaculada. Se le ve físicamente en un momento perfecto por más que presuma de no saber dosificarse. Fue el mejor del Madrid. Después de hacer 0/5 ante el CAI en cuartos de final en triples, metió cinco sin fallo además de repartir cuatro asistencias. Está siendo el jugador mejor valorado del Madrid. Un avión.

Bourousis (6). Ayón le ha adelantado, si bien en la primera parte anotó seis buenos puntos para mantener en el marcador a su equipo. Poco protagonismo en la Copa, su aportación debe mejorar en la final.

Slaughter (0). Para tareas defensivas. Estuvo a punto de hacer un mate espectacular que se salió por pasarse de fuerza. Hace lo que le pide Laso y cumple con su perfil evidente de jugador defensivo. Aporta entusiasmo y un el vestuario.