Los Kings caen ante Dallas y Cousins reconoce su frustración

Los Dallas Mavericks vencieron con facilidad en Sacramento a pesar de las ausencias de Dirk Nowitzki (descanso) y Rajon Rondo (lesión). El conjunto dirigido por Rick Carlisle dominó desde el principio y se fue al descanso con una renta de casi 20 puntos (60-43) ante unos Kings que no pusieron demasiada oposición y que vieron cómo DeMarcus Cousins terminaba desquiciado, una noche más, el partido. El pívot, seleccionado como suplente para el All-Star en sustitución de Kobe Bryant, fue el máximo anotador del equipo (23), el máximo reboteador (11) y el segundo máximo asistente (3). Para que se hagan una idea, el siguiente jugador que metió más puntos en los Kings fue Rudy Gay, con sólo 11. Un desastre.

Al término del encuentro Cousins dejaba claro su descontento: "Los mismos chicos que ganamos antes son los que están en el vestuario ahora. Somos el mismo equipo, el mismo que todo el mundo elogiaba al principio de esta temporada, así que podemos hacerlo". Preguntado sobre si era el año en el que se sentía más frustrado, contestó: "Absolutamente. Si jugamos duro y nos esforzamos en ganar estoy bien con eso. Pero llegar aquí y sólo dejarnos caer como hemos hecho esta noche es inexcusable", explicó, en unas declaraciones que recoge Jason Jones, periodista del 'Sacramento Bee'.

Lo cierto es que al mejor año de Cousins (estadísticamente uno de los mejores años de un pívot en las últimas décadas), no le sigue una continuidad en el nivel de juego de sus compañeros. Desde el inexplicable despido de Mike Malone y la decisión de poner como entrenador jefe a Ty Corbin los Kings van en barrena. 12º del Oeste, a nueve partidos y medio de los Playoffs y con la sensación de que su estrella cada día tiene más ganas de irse. Quién no.