Lavrinovic y Gecevicius aplastan al Baloncesto Sevilla

La Eurocopa se convirtió desde hace algunas semanas en una piedra en el camino del este Baloncesto Sevilla. La crisis de resultados se alargó con una contundente derrota ante el Lietuvos Rytas, un equipo que supo sacar a la luz todas las deficiencias de un plantel sin orden ni ideas. Gecevicius y Lavrinovic se bastaron para tumbar la esperanza visitante y rematar la tercera derrota de los de Scott Roth en este Last 32.

La historia no comenzó con tanto desequilibrio como mostró posteriormente el marcador final. Woodside tiró de galones recién tomados para explicar qué hace bien y qué mal. Sus penetraciones hicieron daño en la medida en que encontró espacios que posteriormente se bloquearon. Berni tomó sus bazas para tirar de ímpetu, pero el colectivo volvió a responder sólo en algunos tramos. Porzingis encontró su sitio y apuntó su nombre en el de protagonistas de las acciones más espectaculares, pero el Lietuvos encontró el camino del triunfo parcial (21-19) para asegurar a los sevillanos que su realidad era otra bien distinta.

El segundo cuarto tumbó cualquier ilusión en los de Roth. Las estrellas lituanas tiraron de fuerza y energía para reflejar las enormes diferencias que a día de hoy existen entre ambos clubes. El Baloncesto Sevilla trató de correr, pero sus piernas respondían mejor que sus manos mientras que los locales comenzaban a apuntillar un partido que dejó de lado la igualdad. Lavrinovic encontró su lugar y sus triples fueron dañando la moral de un equipo andaluz que nunca supo frenar su aparición. Gecevicius siguió su estela y terminó anotando siete triples para alegría de la afición local, volcada con un baloncesto atractivo y letal. El mismo que sigue buscando el cuadro de Roth.

El equipo sevillano volvió a dejar el detalle significativo de ganar el último cuarto (17-19), como ante el Turow polaco. Una anécdota en una historia que debe suponer el fin de parte del proyecto que lidera en el banquillo Scott Roth. Los 18 puntos de Porzingis y los 10 de Byars maquillaron un marcador significativo (100-78). El crédito, si quedaba alguno, llega a su fin. Quizás el mayor problema de este Baloncesto Sevilla ya ni siquiera radique en los protagonistas que repitieron una nefasta actuación en Europa. Lo que comenzó siendo un sueño se ha convertido en una pesadilla.