SIXERS 103 - MAVERICKS 110
Los Sixers se empeñan en ser el peor equipo de la historia NBA
El equipo de Filadelfia ha superado su peor arranque de siempre (0-16) y está a dos derrotas de igualar el de la Liga (0-18, New Jersey Nets, temporada 2009-10).
Los Sixers están dispuestos a hacer historia en la NBA. Esta madrugada los Dallas Mavericks (sin Nowitzki que no jugó por descanso) volvieron a endosarles una derrota (103-110) y tras 16 partidos disputados aún no han conocido la victoria (0-16) y ya han superado su peor arranque de siempre, el 0-15 establecido en la temporada 1972-73. Así, los de Filadelfia se han unido a un selecto Top-5 que encabezan los New Jersey Nets de la campaña 2009-10 con un balance inicial de 0-18. Y el problema es que no se ve que este equipo pueda ganar.
Peores arranques
Con una plantilla muy joven (de los jugadores que puso en pista contra los texanos Brett Brown, sólo Luc Mbah a Moute tiene más de dos años de experiencia en la Liga), los Sixers han establecido un proyecto a largo plazo con una media de edad de 23,3 ahora mismo, pero arriesgado. Michael Carter-Williams, Nerlens Noel, Joel Embiid... son algunos de los jugadores con un futuro muy prometedor en la mejor liga de baloncesto del mundo, pero ahora mismo, lo único que pueden hacer es morir con dignidad en cada partido, tratando de no convertirse en el equipo con el peor porcentaje de derrotas de la historia, establecido en la 2011-12 por los Charlotte Bobcats (7-59). El asunto es complicado y el calendario ahora mismo no ayuda: San Antonio Spurs, el actual campeón, es el siguiente rival, luego viene los Wolves y los Thunder. Y es en Oklahoma, si no vencen antes, cuando pueden superar el récord de los Nets.
"Estoy bien y no quiero que los chicos se preocupen por ningún récord. Sólo tenemos que mantener nuestro grupo unido y pasar esta etapa. Tengo mucho respeto por este grupo porque su espíritu aún no se ha roto", manifestó Brown al acabar un encuentro más disputado que el del pasado 13 de noviembre, cuando los de Carlisle (ya lleva 301 victorias como guía de los Mavericks) les endosaron un sonrojante 123-70, con más balones perdidos (28) por los Sixers que tiros de campo (23).
Filadelfia perdía por sólo cuatro puntos cuando se inició el cuarto trimestre e incluso a falta de 6:04 para acabar el partido un triple de Carter-Williams, el mejor de su equipo con 18 puntos, 16 asistencias y 10 rebotes, estableció de nuevo un esperanzador 94-98, que Parsons, con otro lanzamiento desde el perímetro, volvió a subir a nueve (96-105), cuando sólo quedaban 2:35 por jugarse.
"Estamos con el corazón roto por no haber ganado. Pero creo que vamos a ser recompensados por el trabajo que se está realizando y espero que sea más pronto que tarde", continuó el entrenador de un equipo que para algunas casas de apuestas puede ser el primero en realizar una campaña en blanco (0-82). Idea casi absurda, pero no imposible que vuelve a poner sobre la mesa la tan recurrente palabra 'Tanking', es decir, hacer todo lo posible por tener el peor balance para conseguir un buen puesto en el próximo draft, situación que está creando un gran problema a la imagen de la NBA. Adam Silver, preguntado nuevamente por el asunto y más concretamente sobre la situación de la franquicia de la ciudad del Amor Fraternal, señaló que no posee una "varita mágica" para resolver el problema:
"Me piden que la Liga se meta en la gestión de los Sixers, pero ¿para hacer qué? Creo que últimamente las decisiones de los propietarios sobre como estructurar sus plantillas y planificar el futuro del equipo son exclusivamente de ellos y deben de vivir con ellas. La NBA no tiene una fórmula mágica para que los Sixers actúen de una manera distinta", subrayó el Comisionado.